Urbanismo

El Raval Roig, el barrio de pescadores de Alicante se hace notar

Los vecinos aprovechan la romería de Santa Faz para pedir con carteles en sus casas un lavado de cara para la zona

Imagen de la pasarela que une la calle Virgen del Socorro con la playa del Postiguet en Alicante.
Edificios de la calle Virgen del Socorro, en el barrio del Raval Roig, en Alicante, enfrente de la playa del Postiguet.La Razón

El Raval Roig -o arrabal rojo, en castellano- el antiguo barrio de pescadores de Alicante es un lugar único en la ciudad, que se sitúa extramuros de la ciudad y que conserva el encanto de antaño e incluso existe un taller en el que se cosen de manera artesanal redes de pesca. Esa es la cara; la cruz de la moneda es que, por estar a las fueras, aunque a un paso del centro histórico de Alicante, se sienten olvidados e ignorados por el Ayuntamiento.

Un olvido que se convirtió en pancartas reivindicativas que los vecinos de la calle Virgen del Socorro colgaron de sus balcones para llamar la atención, y mucho, en un día como el de Santa Faz en el que la romería pasa por esa calle. El mensaje, claro y contundente, pedir mayor atención al Ayuntamiento con frases como “¿Y mi barrio pa’cuando?” o “El Raval Roig existe”.

Según explica Ángel M., comerciante y residente del barrio, los vecinos se sienten poco escuchados por el Ayuntamiento; para ser exactos piden, agrega, un centro comunitario, es decir, un lugar donde reunirse; mejoras en las aceras o que se adecente una balsa de agua muy antigua que hay en la zona y se convierta en un parque; en definitiva, un plan de actuaciones para mejorar la imagen del barrio y la calidad de vida de los vecinos.

Se trata de un barrio, además, que está enfrente del mar; en concreto, de la playa urbana del Postiguet, y en las faldas del Castillo de Santa Bárbara; algo que convierte la calle Virgen del Socorro en una de las más transitadas por los turistas. De hecho, de esa calle parte una pasarela para acceder a la paya, sin necesidad de cruzar la carretera, así como un ascensor con el que bajar a la playa o a la Avenida Juan Bautista Lafora, desde la que se sube en otro ascensor a la fortaleza.

Es un barrio que además tiene su propia idiosincrasia, siendo una de las pocas zonas de Alicante en la que se habla valenciano y conserva las fiestas populares más antiguas de la ciudad que se celebran en el mes de septiembre y datan del año 1839. Unas fechas en las que salen sus patronas en procesión, la Virgen del Socorro y la Virgen del Lluch.

Otra de las tradiciones que se mantiene viva es la procesión del Lunes Santo, en la que de la ermita de Virgen del Socorro, sale El Morenet, el patrón de los hombres del mar.

En el barrio aún quedan casas de colores, ocupadas antaño por pescadores, algunas de ellas rehabilitadas y otras deterioradas o muy deterioradas, con desperfectos en sus fachadas. Lo que sí que sigue intacta es su personalidad, la de un barrio de pescadores que pide unas calles y zonas comunes mejores y más decentes.