Cultura

Escritores y expertos en propiedad intelectual defienden el uso responsable de la Inteligencia Artificial en la cultura

Un informe de la Cátedra Planeta y el centro de estudios HUMA de la Universidad Internacional de Valencia pide la regulación de la IA y su impacto en la sociedad

Escritores y expertos en propiedad intelectual defienden el uso responsable de la Inteligencia Artificial en la cultura
Escritores y expertos en propiedad intelectual defienden el uso responsable de la Inteligencia Artificial en la culturaLa Razón

Un informe de la Cátedra Planeta y el centro de estudios HUMA, ‘IA, literatura y creación audiovisual: los algoritmos frente a la imaginación’ ha puesto de relieve el uso responsable y la regulación de la inteligencia artificial en la Cultura y su impacto en la sociedad. Escritores como Agustín Fernández Mallo, Lorenzo Silva, Maria Oruña, Ana Merino o expertos en temas de propiedad intelectual y gestión cultural como Javier Díaz de Olarte, Francesc Bracero o Cristina Consuegra han participado en la elaboración de este estudio monográfico.

Cabe destacar que la irrupción de la IA generativa y la normalización de su uso a escala global plantea serios desafíos dentro para el sector educativo y cultural conocido hasta la fecha. Según los últimos datos publicados por la Unesco, más de dos tercios de los estudiantes de secundaria de medio mundo ya emplean la IA para realizar sus ejercicios y tareas de clase, pero el control docente y normativo sobre su aplicación en el aula sigue siendo minoritario (solo un 10% de las escuelas y universidades han evaluado de forma oficial el uso de esta tecnología en las aulas y han fijado protocolos o directrices para su uso responsable, atendiendo a los datos oficiales de la Unesco relativos al 2023).

En el ámbito cultural, el uso de la Inteligencia Artificial generativa con modelos como Gemini, Copilot o ChatGPT comienza a transformar los procesos creativos y divulgativos tradicionales a través de nuevas formas de escritura basadas en el aprendizaje generativo y en el uso extensivo de algoritmos. Con ellos se ordenan y automatizan grandes bloques de texto o incluso estilos literarios distintos. Ocurre con ChatGPT, cuyo uso en la publicación de libros ha aumentado exponencialmente en los últimos tres años. Según el último informe de la agencia Reuters, a principios de 2023, en Amazon ya había más de 200 títulos firmados con esta IA, y actualmente la cifra asciende a más de 5.000.

Ante la expansión de esta tecnología en el sector editorial y la creciente preocupación mostrada por autores, académicos y escritores en el uso sin consentimiento que la IA hace de sus obras y recursos en el entrenamiento de sus modelos, la Cátedra Planeta de Literatura y Sociedad y el Centro de Estudios en Humanidades, Cultura y Comunicación en la era digital (HUMA) de la Universidad Internacional de Valencia-VIU, perteneciente a la red de educación superior Planeta Formación y Universidades, ha publicado un extenso informe de recomendaciones y aplicaciones éticas de esta tecnología en el campo de la creación literaria, la cultura audiovisual y en los hábitos lectores de las nuevas generaciones.

El estudio, titulado 'IA, literatura y creación audiovisual: los algoritmos frente a la imaginación', a su vez transfiere los avances y el conocimiento de la Cátedra de Literatura y Sociedad de la Universidad Internacional de Valencia y en él han participado escritores como Agustín Fernández Mallo, Lorenzo Silva, Maria Oruña, Ana Merino o expertos en temas de propiedad intelectual y gestión cultural como Javier Díaz de Olarte, Francesc Bracero o Cristina Consuegra.

“Mediante este informe se visibilizan los efectos inmediatos de la IA en el sector editorial y las soluciones que proponen los académicos, creadores y expertos que han colaborado en las Jornadas de la Cátedra Planeta de Literatura y Sociedad, quienes solicitan un mayor control y regulación en el uso indiscriminado que la IA generativa hace sobre sus modelos. Debemos proteger las obras y también los derechos de los autores, porque eso es también lo que nos permitirá tener mayor capacidad crítica y una sociedad más cultivada y libre”, explica la escritora Ana Merino y directora de la Cátedra Planeta de Literatura y Sociedad.

En materia de derechos de autor y creaciones intelectuales en el marco digital, la IA plantea serios desafíos a falta de crear un marco jurídico común y una regulación específica sobre el uso y autorización que los autores deben hacer sobre la reproducción y difusión de sus obras. Así lo demuestra la última encuesta realizada por el Centro Español de Derechos Reprográficos (Cedro), en la que consultó a más de 9.000 escritores y traductores españoles para conocer sus percepciones y necesidades sobre el uso de la IA en el sector. En ella, un 96,5% reclamaba que el uso de las obras en el entrenamiento de los modelos de IA debía contemplar la autorización expresa del autor original.

En este sentido, Javier Díaz de Olarte, director jurídico en Cedro y uno de los expertos que ha aportado su visión en la elaboración de este informe, recomienda denominar “producto” y no “obra” a aquellos contenidos creados con IA. “La obra es el resultado de un trabajo creativo de una persona y tiene la marca de un escritor. Si acaso, lo que crea la IA es un producto, porque alguien ha cogido el producto de un trabajo y lo está usando para lucrarse. Lo podemos llamar como queramos, en lugar de obras llamémosle datos y texto, pero se ha copiado cuando, desde siempre, el primer derecho de un autor es decidir si su obra se copia o no”, señala en el informe.

Para el director del centro HUMA, Arnau Vilaró, los análisis de los expertos y académicos que han participado en este informe nos permiten avanzar “hacia la creación de una regulación global sobre la IA que ponga la tecnología al servicio de la cultura y donde la educación sobre el uso responsable de esta tecnología debe involucrar tanto a creadores como a la ciudadanía en la defensa de los derechos de autor y de la creatividad humana”.