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Crítica de cine

Crítica de “Te quiero imbécil”: Pues yo no, atontado ★★✩✩✩

Natalia Tena y Quim Gutiérrez protagonizan "Te quiero imbécil", lo nuevo de Laura Mañá
Natalia Tena y Quim Gutiérrez protagonizan "Te quiero imbécil", lo nuevo de Laura MañálarazonImdb

Dirección: Laura Mañá. Guión: Abraham Sastre e Iván José Bouso. Intérpretes: Quim Gutiérrez, Natalia Tena, Ernesto Alterio, Alfonso Bassave. España, 2020. Duración: 83 minutos. Comedia romántica.

Pues podría parecer como que la película dirigida por Laura Mañá «rima» o le hace un guiño a la deliciosa «Bésame, tonto» (Billy Wilder, 1964), con Dean Martin y Kim Novak, pero ni de cachondeo, aquí los tiros van por otro lado aunque resultan, en el fondo, bastante predecibles. Pues bien, vayamos por partes: el susodicho imbécil del título, Marcos (Quim Gutiérrez, cómodo siempre en este género), que así lo llamaba «cariñosamente» una antigua compañera de instituto, lo acaba de plantar su novia tras siete años durante la cena en la que el pobre tipo le pide matrimonio. Pero hay más: mirando a cámara, Marcos cuenta que también lo han echado del trabajo y que debe volver a vivir con sus padres, que no están precisamente felices con el regreso del hijo, treinta y cinco tacos, pródigo. Un amigo del protagonista decide entonces convencerlo para que se transforme en el perfecto hombre del siglo XXI (lástima que el guión no profundice más en este asunto, como lo hace en esas escenas donde una joven gordita manda a Marcos bien lejos, ya que habría resultado interesante) para conseguir ligar por Tinder y otros enlaces de contacto; es decir, que vaya al gimnasio y pierda la barriguita cervecera, coma de manera saludable, vista moderno aunque el pantalón le corte la circulación sanguínea de las piernas...

Y, precisamente, el filme intenta parecer eso, moderno, para narrar una clasiquísima historia de amor, la de Marcos con la chica antes dicha que conoció en clase, y no se trata de un «spoiler» porque se ve venir desde que ella aparece por primera vez con su melena rosa, cuando en realidad, por mucho internet, por mucho sexo, lenguaje «relajado» y más gaitas, lo que nos está contando es una predecible comedia romántica de las de siempre. Si hasta hay un descarado homenaje a «Cuando Harry encontró a Sally» en forma de orgasmo fingido... Así que mientras trata de llevar a la práctica los «consejos» que por «Youtube» lanza un gurú que parece nació en Argentina y con la cara muy dura que vale lo mismo para un roto que para un descosido, comienza a recomponer partes de su vida y decide reconquistar a su ex pareja, Marcos cae en la cuenta de que, en el fondo, lo que quiere es que lo amen como Dios manda, y no tanta cama al tuntún.

Lo mejor: Ernesto Alterio, divertidísimo, en el papel de un omnipresente gurú argentino que «trabaja» por internet

Lo peor: Mucho ligar por las redes y mucho lenguaje «relajado», pero es una comedia romántica casi de manual