#culturaencasa: De la belleza brutalista del edificio Torres Blancas al grato esnobismo de las fiestas de Scott Fitzgerald
Unas recomendaciones culturales para este sábado plagadas de la arquitectura orgánica de Sáenz de Oiza, las genialidades de Billy Wilder o los sonidos eclécticos de Joe Crepúsculo
Creada:
Última actualización:
Exposición online
“Sáenz de Oiza. Artes y Oficios”
Cuando Franciso Javier Sáenz de Oiza construyó un experimento vanguardista encargado por Juan Huarte tan arriesgando como Torres Blancas, pensó en los árboles. En la peculiaridad orgánica del movimiento ascendente de las ramas que de manera tan inconscientemente metafórica representaban el recorrido natural de su talento. El objetivo era, tal y como él mismo confesó «agredir el paisaje y molestar» y fue capaz de convertir en realidad al menos el segundo de los propósitos porque el aspecto de este monumental edificio ubicado en Avenida de América presentaba una constante en los proyectos del arquitecto que no gustaba a todos por igual (especialmente a los inquilinos de las viviendas); el reducido tamaño de sus interiores. Pese a esto, Torres Blancas está considerada una de las joyas arquitectónicas brutalistas de la ciudad madrileña. «Sáenz de Oiza. Artes y Oficios» es el nombre que lleva por título la exposición del Museo ICO, cuya clausura estaba prevista en un principio para el mes de abril y que ahora amplía su duración y adapta su contenido a las ventajas inmersivas de la plataforma digital de su web oficial. Una oportunidad verdaderamente interesante para profundizar en la figura y el desarrollo estético del trabajo de un creador de símbolos como el arquitecto navarro.
Disponible en: www.fundacionico.es
Disco
“Disco duro”
Hay quien considera que la música que hace el cantante barcelonés tiene las cualidades suficientes como para enmarcarla dentro de los parámetros del pop. Pero cuando uno escucha la amalgama creativa que invade las composiciones de Joe Crepúsculo tiene dudas. Es difícil catalogarle pero muy fácil divertirse escuchándole. ¿A qué suena “Disco duro”? A todo menos a tristeza o melancolía. Ya lo advierte en el tema «Un demonio con piel de cordero»: “Mis ojos son ojos de huracán, soy como una especie de leviatán”. Lo dicho, dejen que ese huracán les arrastre. Ya verán lo lejos que llegan.
Libro
“El gran Gatsby”
Ha sido sometida a varias versiones cinematográficas, todas ellas realizadas con mayor o menor precisión aunque igualmente interesantes (recordemos a ese maravilloso Robert Redford como Gatsby en el proyecto de Jack Clayton o la extremadamente actualizada mirada de Baz Luhrmann y su apuesta por Leonardo DiCaprio), pero la autenticidad de su origen literario siempre sigue siendo la opción más deliciosa. Esta es la historia de un amor imposible entre un hombre de origen humilde que ha conseguido hacer fortuna al término de la I Guerra Mundial y Daisy Fai (alter ego de Zelda, la mujer de Fitzgerald), una joven de belleza etérea y relajadas preocupaciones burguesas que simboliza la vacuidad de toda una clase social acostumbrada a vivir rápido. En su momento catalogaron esta obra de “traición al sueño americano” y es que el escritor estadounidense supo trasladar con precisión, elegancia, algo de crítica y suma inteligencia el espíritu de toda una generación. Qué maravilloso resultar volver a la descripción de Fitzgerald sobre ese mundo artificial “que olía a orquídeas, a alegre esnobismo, a orquestas que imponían el ritmo del año, resumiendo la tristeza y la provocación de la vida en nuestras melodías. Durante toda la noche los saxofones lloraban el desesperado mensaje de los Blues de Beale Street, mientras cien pares de zapatos dorados y plateados revolvían el polvo”.
Película
“Bésame tonto”
Puede que a priori la tarea de interpretarse a uno mismo resulte relativamente sencilla pero a decir verdad, que ejercicio más complicado eso de señalarse los defectos con el dedo de la propia mano. Dean Martin se bebió, fumó y cantó todas las orillas del mundo y en esta entretenidísima cinta de Billy Wilder, no le quedó más remedio que mostrar cómo lo hacía. Dino, un afamado cantante de jazz con una predilección exagerada por los cuerpos femeninos aterriza en una gasolinera perdida de un pequeño pueblo de Nevada cuyo nombre parece elegido a la perfección, “Clímax”. Tras cruzarse con Spooner, un profesor de música enfermizamente celoso y obsesivo que encuentra en su mujer (Felicia Farr) el origen de todos sus demonios, Dino se verá envuelto en un enredo de esos que empiezan siendo aparentemente sencillos pero que terminan complicándose y desembocando en una brillante lección de estilo marca de la casa. ¿Existen ahora guiones como los de Wilder? En fin, “Bésame tonto” es una historia interesante, menor tal vez dentro de su filmografía, pero muy curiosa para revisar los conceptos actuales de posesión en la pareja y los códigos de comunicación sentimentales. ¡Ah!, y para contemplar a un Dean Martin en todo su esplendor bebiendo vino de un zapato de mujer con la ingravidez de un astronauta.
Disponible en: https://www.filmin.es/pelicula/besame-tonto
Serie
“Peaky Blinders”
Después de ver al actor Cillian Murphy en “El viento que agita la cebada” (emocionante película sobre las tripas del IRA) se da una cuenta de que tiene una de esas caras enigmáticas y poderosas que a pesar de proyectar una superficie aniñada y perfecta, casi como de porcelana, consigue inquietar y generar infinidad de sensaciones extrañas en el espectador. Es un intérprete magnético. Y en esta serie maravillosamente bien ambientada, Murphy da vida al jefe de una familia de gánsters irlandeses real de origen gitano conocidos como los Peaky Blinders. La ciudad de Birmingham se convierte en testigo directo de las ambiciones de la familia y de las tramas criminales y políticas que se irán desarrollando con Winston Churchill en el poder y los ecos de la Primera Guerra Mundial resonando.
Disponible en: https://www.netflix.com/es/title/80002479