Riddle: “Randy Orton me ha ayudado a subir de nivel sobre el ring”
El “Original Bro” de WWE reflexiona sobre su pareja de baile actual y analiza su estado de forma de cara a Money In The Bank, donde podría hacerse con una oportunidad por el título mundial
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Desde hace unas semanas, por mérito propio en las casi tres horas de parrilla que ocupa RAW los lunes por la noche, Riddle se ha convertido en el mayor entretenimiento del contenido semanal de WWE. Perdido el “Matt” en su ascenso al roster principal de la empresa de “wrestling” más importante del mundo, Riddle ha ocupado los titulares del mundo de la lucha libre mundial por más razones de las que a él mismo le gustaría. Durante varias semanas, en junio de 2020, fueron varias las luchadoras y mujeres relacionadas con el mundo del “wrestling” que en lo que luego se denominó como #SpeakingOut ofrecieron testimonios y pruebas sobre la cultura del abuso y la violación en la disciplina, sobre todo en Reino Unido, pero con ramificaciones en Estados Unidos y Japón. Candy Cartwright, pseudónimo sobre el cuadrilátero de Samantha Tavel, acusó públicamente a Riddle de forzarla a mantener relaciones con él y le denunció ante los tribunales.
Después de que WWE anunciara y completara una “investigación interna” de las alegaciones de Cartwright determinando que Riddle no tenía relación con ello, esta semana se ha conocido que la demandante ha retirado su denuncia de manera formal. Sin que haya trascendido si se trata de un movimiento de consejo legal debido a la falta de pruebas de la acusación, o se haya llegado a algún tipo de acuerdo económico, Riddle afronta una de las semanas, ya en lo exclusivamente espectacular, más importantes de su carrera: este domingo 18 de julio será uno de los ocho participantes del combate principal de Money In The Bank, el evento de WWE cuyo máximo atractivo es otorgar al ganador del combate un maletín equivalente a una oportunidad por el título mundial. Además, lo hará con la vuelta definitiva de los fans a los estadios, con un trío de shows desde Texas y con aforo casi completo que se cerrarán el lunes con la emisión de RAW. “The Original Bro”, como se le conoce sobre los cuadriláteros de WWE, se sincera con LA RAZÓN sobre su último año y sobre esa relación de amistad con Randy Orton que tantas alegrías está dando últimamente a los aficionados.
-¿Se ha acostumbrado a luchar sin aficionados entre el público, sin nadie físicamente en el estadio?
-Uno nunca se acostumbra. Quiero volver a escuchar a la gente, volver a escuchar sus reacciones, que para eso nos dedicamos a esto. Siendo honesto, estoy bastante acostumbrado a que no haya público o que haya muy poco público, debido a mi paso por empresas más independientes o por el programa Ultimate Fighter, por ejemplo. He peleado en trasteros donde no había más de diez personas entre el público, y eso contando al equipo técnico y a los cámaras. No necesito un gran público para hacer mi trabajo, pero es obviamente mucho más disfrutable con ellos.
-¿Qué significaría para usted ganar el maletín y convertirse en Mr. Money in the Bank, en el principal aspirante al título?
-Creo que soy una de las estrellas más dominantes sobre el cuadrilátero y voy muy en serio. Ya he ganado el Campeonato de Estados Unidos y voy detrás del oro del Campeonato por Parejas de RAW junto a Randy Orton, pero ganar el maletín de Money In The Bank… es otra cosa. Alguien con mi disciplina y mis habilidades se convertiría en uno de los oponentes más peligrosos para estar al acecho. Me gusta ir de frente, pero por supuesto que me consideraría un oportunista válido llegado el momento. Sobre todo con Randy (Orton) a mi lado. Él sabe mucho y eso me puede ayudar, pero si soy sincero no creo que me haga falta el maletín para ser campeón. Puedo ganar el campeonato sin ganar antes el maletín. Si gano este domingo, te doy la garantía de que esta entrevista es con un futuro campeón mundial.
-Partiendo de que no necesita a Randy Orton a su lado, como ha dejado claro, él sigue siendo una superestrella con muchísima experiencia. ¿Qué ha aprendido en estas semanas con él como pareja de baile?
-Randy (Orton) es un perro viejo. Joder, uno de sus motes es “La Víbora” (The Viper). Poco más se puede decir. La manera en la que prepara los combates y se acerca a ellos mentalmente es única. Su presencia es legendaria. Es alguien con un aura especial, con una especie de autoridad que no se puede ganar, escribir o inventar, simplemente se tiene o no. Mi inteligencia en el ring se ha disparado desde que he empezado a luchar contra él, me ha hecho madurar muchísimo. Siempre he sido un poco despreocupado sobre el ring, y él me ha ayudado a centrarme. Creo que Eric Bischoff fue el que lo dejó más claro el otro día en un podcast, cuando dijo que Randy no gana nada conmigo pero yo me convierto en un luchador mil veces mejor a su lado (ríe). Bromas aparte, creo que también le doy una dimensión cómica a su personaje que no tenía, porque es mi compañero pero también es mi colega, mi “bro”. Estamos acostumbrados a verle como un lobo solitario, pero ahora tiene a esta pequeña culebrilla junto a él. Nos ayudamos mutuamente a llegar al siguiente nivel.
-Cuando los guionistas o el equipo creativo les avisó y les dijo “vale, vamos a poner RKBro en marcha”, ¿cuál fue vuestra primera impresión? Y también me interesaría conocer la de Randy Orton, porque siempre se le ha tenido como alguien muy temperamental en el vestuario…
-Originalmente, la idea fue mía y se la expliqué a los creativos un par de semanas antes de que se pusiera en marcha. Cuando dije que debería llamarse “RKBro” todos se rieron, pero vieron rápidamente que podría tener sentido, sobre todo desde el punto de vista de la comedia. Luego nos explicaron que lucharíamos entre nosotros, y pensé que lo habían descartado y que nos montarían un enfrentamiento, pero no fue así y por suerte me hicieron caso. Esto fue cerca de Backlash, más o menos. Nos pusieron después en un combate por parejas, como para probar nuestras dinámicas, y salió también que repetimos. Supongo que solo hacía falta un poco de fe. El proceso fue muy parecido a cuando me junté con Pete Dunne y montamos los “Broserweights”, aunque allí él estuvo mucho más envuelto en ello. Son equipos improbables que no deberían existir pero ahí están, y a la gente parecen gustarle. Es una especie de “déja vu”, así que tenemos que ir a por el oro también.
-Hace poco, hablando con Tommaso Ciampa, coincidíamos en que la evolución constante es muy importante en WWE. ¿Cuál crees que es la principal diferencia entre el Matt Riddle que triunfó en NXT y el Riddle a secas que se ha convertido en la principal atracción de los lunes por la noche en RAW?
-NXT es entretenimiento, como todo en WWE, pero lo considero algo más parecido al deporte puro, a la lucha libre. Quizá a todo el mundo o a la empresa no le guste esa palabra, lucha libre (“wrestling”), pero lo digo en referencia a la competición, que es mucho más física. Porque, créeme, lo es, pero en el roster principal la cosa cambia. Tienes que evolucionar, y yo lo hecho desde las independientes, no solo desde los tiempos de NXT. El caso que me mencionabas de Tommaso Ciampa es paradigmático, porque él lo ha sido todo. Ha ido evolucionando de tipo bueno a malo, a todo lo contrario, y yo en cambio… sigo siendo The Original Bro. Con matices, claro, pero sigo siendo el mismo. Quizá mi personaje es un poco más estúpido, más juguetón que antes, donde solo era relajado fuera del ring, pero es parte de la evolución. Y bueno, la verdad es que soy y me comporto como un tontorrón, o sea que en realidad me he permitido ser más yo mismo sobre el ring. Además, ahora tengo más oportunidades para hablar y para expresarme como Riddle, lo cual me gusta muchísimo. WWE es entretenimiento, y si no eres entretenido no harás dinero.
-Este año seréis hasta ocho luchadores peleando por el maletín. ¿Cómo se puede preparar un combate por el dinero en el banco?
-¡Yo creía que eran 6! Va a ser espectacular, y no hay manera de prepararse para ello. Mi entrenamiento pasa por fortalecer mi cuerpo todo lo que pueda, hacerme lo más duro posible. Al final, no se trata de quién pega más fuerte, si no de quién tiene la fuerza necesaria para subir esa escalera y recoger el maletín. Mi meta actual, la misma desde que empecé a luchar, es mantenerme lo más saludable posible y poder dedicarme a esto durante muchos años.