Escultura

Andy Warhol, que estás...muerto

Eugenio Merino recrea en una galería de Nueva York una imagen hiperrealista del artista en posición yacente

“Here Died Warhol”, de Eugenio Merino
“Here Died Warhol”, de Eugenio Merinolarazon

Eugenio Merino recrea en una galería de Nueva York una imagen hiperrealista del artista en posición yacente

De cuerpo presente. Perfectamente trajeado y cuidado hasta el más mínimo detalle reposa el padre de la Factor con el traje como si lo acabara de sacra de la tintorería. “La intimidad de la escultura de Merino en la galería acentúa la experiencia del turista cultural al contemplar el arte y la popularidad del legado de Warhol”, aseguran desde la sala Unix de Chelsea, en al isla de Manhattan, de esta exposición de nombre tan singular como “Here Died Warhol” y que ha sido comisariada por el colectivo Los Interventores y que no quiere otra cosa que situar al personaje y lo que fue su devenir en al Gran Manzana.

El artista del pelo blanco se ha transformado en una marca, un atractivo turístico cultural más de la urbe. Si usted quiere puede tomarse un “selfie” con el cuerpo yacente del padre de la sopa de tomate y prácticamente tocar el aura que desprendió y la fascinación que aún hoy (y lo que te rondaré) sigue despertando. Y al tiempo seguir cómo fue su devenir y por dónde se movía mediante y folleto y andar por las que calles por las que se movió gracias a unas audioguías o visitar el lugar donde le disparó en 1968 Valerie Solanas e incluso el hospital donde se repuso. No hay freno. No es la primera vez que Merino, al que siempre perseguirá haber sido el hombre que metió a Franco en un congelador en ARCO, se la juega con un personaje a tamaño real. El año pasado hizo lo propio con Picasso, con el mismo título, salvo por el nombre del difunto, que lógicamente cambiaba por el del malagueño. En Málaga la visitaron unas 20.000 personas. Y en Nueva York lo que quiere subrayar es básicamente eso, que usted puede disfrutar de una experiencia turístico cultural con un artista que está muerto. Si no la ha visto y piensa darse una vuelta por Nueva York, tiene tiempo hasta el 9 de junio.