Miguel Falomir, propuesto para sustituir a Miguel Zugaza en el Prado

Miguel Falomir Faus es el candidato propuesto por la comisión constituida en el Prado para estudiar los perfiles de quienes podrían dirigir la pinacoteca en sustitución de Miguel Zugaza

La comisión nombrada el pasado 31 de enero para elegir al nuevo director de El Prado ha apostado por una persona conocida por todos, por un hombre de la casa: Miguel Falomir. Y lo ha hecho con la unanimidad de todos sus miembros y en la primera reunión que ha mantenido sobre este asunto, según ha podido confirmar este diario. Su decisión se trasladará al Patronato del Museo que se celebrará el 17 de marzo y de ahí pasará inmediatamente al siguiente Consejo de Ministros para que se apruebe este nombramiento.

Desde que en noviembre Miguel Zuzaga anunciara por sorpresa su renuncia a permanecer más tiempo al frente de esta institución, los rumores sobre los candidatos destinados a sucederle se habían disparado. Se manejaron varias propuestas y nombres. El que parecía encabezar la lista en un primer instante era Gabriele Finaldi, actual director de la National Gallery de Londres, pero ante su temprana negativa, comenzó un incesante baile de «posibles».

Miguel Falomir, que lleva en el Museo desde 1997 –cuando fue nombrado Jefe del Departamento de Pintura Italiana y Francesa (hasta 1700) de la pinacoteca, un puesto en el que se ha ganado una reputación intachable como investigador e historiador, como refrendan las exposiciones que ha comisariado– era una opción desde el principio. Y una de las más lógicas por la trayectoria que ha mantenido y por el estrecho conocimiento que posee del museo. De hecho, su nombramiento ha estado respaldado desde el principio por Miguel Zugaza, que, cuando anunció que se marchaba, ya adelantó que recomendaría a una persona para su relevo.

w Un largo bagaje

Pero parece ser que en la reunión que Miguel Falomir sostuvo en una primera instancia con el presidente del Patronato, José Pedro Pérez-Llorca, no se alcanzó, según personas cercanas, el entendimiento óptimo que requieren esta clase de encuentros, por expresarlo de alguna manera. Hay que tener en cuenta un asunto: Pérez-Llorca poseía otro candidato entre sus preferencias, justamente una de las mujeres que sonaban para este puesto, Leticia Ruiz, una de las grandes especialistas en nuestro país sobre El Greco. Esto hizo que Falomir, que siempre ha estado vinculado a la investigación (ahora mismo está trabajanado en el catálogo razonado de las obras de Tiziano en la pinacoteca madrileña) diera un paso atrás.

Las tensiones entre las distintas partes que han jugado este delicado «match» con escenas de ajedrez se resolvió finalmente durante la tarde de ayer eligiendo a Falomir, una persona que, aparte de haber acompañado a Zugaza al frente de esta institución desde que Gabriele Finaldi se marchara en abril de 2015, un rasgo que todos destacan, ya llevaba consigo un largo bagaje que explica su rápida evolución y prestigio en el arte, como avala su vinculación a instituciones norteamericanas e italianas (unos cargos que garantizan su conocimiento del inglés y el italiano, algo de tremenda importancia en el actual escenario internacional del arte). En apenas siete años, desde que se licenció en 1989 con premio extraordinario por la Universidad de Valencia hasta que aterrizó en El Prado, tan solo ocho años más tarde, fue becario del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, disfrutó de una beca Fullbright en el Institute of Fine Arts de la Universidad de Nueva York y obtuvo después la plaza de profesor titular del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Valencia.

A pesar de que algunos defendían que era el momento óptimo para que reemplazara un rostro femenino a Zugaza, quien ha culminado el proceso de modernización de la pinacoteca, al final, no ha sido así. La Comisión –que está integrada por José Pedro Pérez-Llorca, presidente del Real Patronato, Amelia Valcárcel, vicepre- sidenta, Fernando Benzo, secretario de Estado de Cultura, Pilar del Castillo, Javier Solana, Antonio Bonet Correa, miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Hernán Cortés Moreno, Luis Alberto de Cuencia, María Dolores Jiménez-Blanco, Luis Lafuente Batanero y el propio Zugaza– ha optado por alguien respaldado por sus investigaciones y por las muestras de gran calidad que ha comisariado, como demuestran las exposiciones de Tiziano, organizada en 2005; la de Tintoretto, de suma complejidad, que se pudo ver en 2007; la del retrato del Renacimiento, que se celebró al año siguiente, y la titulada «Las Furias: alegoría política y desafío artístico», que se organizó en 2014.