Quiero ir al Museo del Prado con Rafa Nadal

A la pregunta de con qué personaje célebre la gente recorrería el museo, el primero en la lista del estudio sociológico es el tenista español.

El estudio sociológico encargado al Instituto Sondea por el Museo del Prado, que es nuestra primera pinacoteca, no lo olvidemos nunca, mueve a la reflexión y nos arranca una sonrisa. En el año de su Bicentenario la institución ha querido ver cómo una representativa muestra del conjunto de los españoles perciben el museo. Y, dicho sea de paso, no lo ven mal. Aunque se sucedan demasiado los lugares comunes. Entendemos que Velázquez es un artista mayúsculo, como lo son Goya y El Greco y El Bosco y Sorolla, y que el 37,14% de los preguntados así considere del sevillano, como también que sea quien mejor representa a España (un 40,24% así lo siente), pero hay más. Muchos más.

Y que conste que yo lo admiro profundamente. Mentarle a él es nombrar a «Las Meninas», el cuadro favorito para seis de cada diez españoles, mientras que «La Maja desnuda» lo prefiere un 38,31%, fundamentalmente hombres. Pocas sorpresas, aunque esperábamos más ambición en los encuestados. Bien es verdad que si en París se hubiera realizado un sondeo similar con el Louvre como pretexto la «Mona Lisa» habría ganado por goleada. ¿Seguro? «La penetración de los grandes maestros es enorme, desde los estratos más cultos a los más populares», contestan desde el museo, para quienes esta radiografía se pretende que mueva a la reflexión de quien mira, es decir, del visitante.

No sé yo... No obstante los tres mil y pico preguntados consideran El Prado como un centro «clásico», «enriquecedor» y «maravilloso» y relacionan al museo con tres adjetivos: «español» (48,47%), «público» (40,98%) y «universal» (40,88), aunque un 38%, sí es la cifra, no lo ha visitado nunca. ¡Nunca! ¿Y por qué? Pues la principal razón esgrimida es la falta de tiempo o la preferencia por otra manera de emplear su ocio. Eso sí, el 94,88% afirma que el Museo del Prado es una de las aportaciones de España a la cultura universal, que grandilocuente, al menos, queda. Y dejamos para el final la guinda. Ante la pregunta de con qué personaje célebre recorrerían el museo el primero en la lista es Rafa Nadal. «Es alguien cercano, un personaje que genera empatías, un tipo que cae bien y que no polariza ni tensa. Es la parte lúdica del estudio», nos apuntan desde la pinacoteca. Confieso que jamás se me habría pasado por la cabeza elegir al tenista como compañero de visita.

Ni tampoco a Dani Rovira, Alaska, Buenfuente, Will Smith o el Papa, que son las otras compañías destacadas. ¿No sería mejor recorrerlo junto a su director, Miguel Falomir? Debe ser que una no está habituada a estos estudios, en clave, digamos, más gamberra, y me chirrían. Conclusión: visiten el museo, solos o acompañados, acompañadas o acompañades, pero vayan, abran los ojos como platos y dejen el móvil en casa. Una joya de este calibre lo merece. Y busquen «Noli me tangere», de Correggio.