Escenarios madrileños

Pérez de la Fuente y María Pagés, nuevos directores del Fernán Gómez y de la Nave de la Danza

El otro nombre del día es el de Aránzazu Riosalido, que desembarca el Teatro Circo Price para remplazar a María Folguera

Juan Carlos Pérez de la Fuente
Juan Carlos Pérez de la Fuente vuelve a los escenarios madrileñoslarazon

"Uno hace planes y la vida manda", asegura un tipo que el 8 de febrero cumplirá 65 años. Primaveras suficientes para dar un paso al lado y dedicarse a tareas de estrés cero, como hace pocas semanas le comentaba vía carta la propia Tesorería General de la Seguridad Social a Juan Carlos Pérez de la Fuente: "Señor, si usted quiere, tras 50 años cotizados y cumpliendo 65 años, ya no tendrá que trabajar más", resume el que acaba convertirse en director del Centro Cultural de la Villa Fernán Gómez en sustitución de Laila Ripoll.

"Me dijo que fui el primero en llamarla cuando la nombraron y, por ello y porque nos conocemos desde la RESAD, de cuando vivía con su madre, la transición no ha podido ser mejor", cuenta un Pérez miedoso a romper lo andado por su "amiga". Dice que fueron "unas tres horas" de encuentro para ponerse al día y, sobre todo, para regar una de esas relaciones que no necesitan ruegos: "No te voy a decir nada; si necesitas algo sabes dónde estoy", ofrecía Ripoll.

Pérez de la Fuente llega de nuevo a la dirección de un teatro dependiente del Ayuntamiento de Madrid tras su precipitada salida del Español (2014-16) que tanto le costó sacudirse al de Talamanca del Jarama: "Quitarme lo que pasó ha sido una labor dura, pero aquí estoy y jamás me moveré por el rencor. Dicen que eso da cáncer, que se pudre dentro del organismo. No hablaría nunca de sacarme una espina. Tengo la misma ilusión y espíritu joven pese a los años. El pasado es pasado. El teatro se escribe en presente, y el presente siempre apunta al porvenir".

El de Pérez es uno de los tres nombramientos que terminan de colocar todas las piezas de los teatros madrileños. Tras la llegada de Eduardo Vasco al Español y de Luis Luque a Nave 10, la renovación de Natalia Álvarez Simó en Condeduque y el ya citado desembarco de Pérez en los bajos de Colón, los otros dos nombres son los de María Pagés y Aránzazu Riosalido, que recalarán en la Nave de la Danza de Matadero y en el Circo Price, respectivamente.

La bailaora y coreógrafa de flamenco María Pagés durante el pase gráfico de la obra ‘Paraíso de los negros’ en los Teatros del Canal, en Madrid
La bailaora y coreógrafa de flamenco María Pagés durante el pase gráfico de la obra ‘Paraíso de los negros’ en los Teatros del Canal, en MadridRicardo RubioEuropa Press

Jura y perjura el director que sigue siendo "la misma persona que sube propuestas al escenario que hablen de nosotros" y ya advierte que quiere "sorprender" igual que hiciera con Pelo de tormenta, Pingüinas o Numancia, enumera de tres propuestas (de Nieva, Arrabal y Cervantes) que marcan parte del camino a seguir en el Fernán Gómez. "Empezaré con un autor español", asegura quien tiene "claro" que "hay que centrarse en el repertorio que vamos perdiendo".

Se apoya el director en las intenciones de Marta Rivera de la Cruz (delegada de Cultura del Ayuntamiento) de que los siglos XIX y XX sean el eje vertebral del Fernán Gómez, "pero tanto grandes dramaturgias españolas como extranjeras. No nos cerramos a nada", puntualiza Pérez. "Si me he embarcado en esta maravillosa locura es para no ser convencional ni para fumarme un cigarro, sino para intentar llevar a cabo el mismo discurso que siempre he tenido cuando he estado al frente de un teatro público: repertorio", asegura el que ya fuera director del Centro Dramático Nacional entre 1996 y 2004.

Según el director, un espectador tiene que poder decir cuántos montajes de Divinas palabras (Valle-Inclán) o de La señorita de Trevélez (Arniches) ha visto a lo largo de su vida. "Son las huellas que marcan por dónde ha caminado un país", comenta al tiempo que celebra el próximo estreno de La Regenta, a cargo de Eduardo Galán y Helena Pimenta.

Y si el repertorio va a ser "el santo y seña", dice, de la nueva etapa, el otro incentivo de Pérez de la Fuente es recuperar a quien da nombre al teatro, don Fernando Fernán Gómez, "el último gran conversador": "Su espíritu, sus memorias, sus películas, su discurso de entrada en la Academia contestado por Nieva...". "Hizo de todo y él mismo era materia teatral. Nos tenemos que impregnar de eso", comenta del "hijo de cómicos y nieto de María Guerrero". También abrir el teatro "a las tertulias porque es necesario hablar y dejarnos de tantas redes sociales. Hablar, contrastar, disfrutar de la conversación", continúa. "Siéntate, que tenemos que hablar", le dice Nora a Torvaldo en Casa de Muñecas (Ibsen), y Pérez lo toma como lema, explica, en esta ocasión.

No menos importante es el nombre de Pagés, ganadora del Premio Princesa de Asturias de las Artes en 2022, que ayudará al Ayuntamiento a levantar un centro pionero en España con una programación exclusiva y continuada de danza, ya sea en su versión contemporánea como clásica. Iniciativa que pretende consolidar Matadero como gran contenedor cultural, al tiempo que se potencia un sector de las artes escénicas que lleva tiempo demandando espacios más adecuados para esta actividad.

Reconocida tanto a nivel nacional como internacional, "Pagés ha llevado la danza y la cultura españolas a los mejores teatros y festivales del mundo y es una precursora de la renovación del baile flamenco a través de la mezcla de tradición y modernidad", justifica el Consistorio.

Por su parte, el nombre de Riosalido ya es conocido en el Teatro Circo Price, donde ha colaborado en el desarrollo de conferencias y producciones como investigadora y documentalista de la historia social del circo. De ella surgió la idea original para homenajear el 50 aniversario de la desaparición del Price de la plaza del Rey, el espectáculo Mil novecientos setenta sombreros, que se convirtió en la cuarta producción más vista de la Comunidad de Madrid en el año de su producción.

Entre sus objetivos de nueva directora de la sala de la ronda de Valencia, está el de potenciar el reconocimiento de este espacio con el fin de consolidarlo como marca Madrid y posicionar a la capital como ciudad de circo, reforzando la cultura circense que ya existe; todo ello, sin olvidar su característica de sala polivalente.