La luchadora que se bebió la sangre de su rival tras destrozarle la cara

La estrella de MMA Kayla Harrison se bebió la sangre de Courtney King durante su brutal enfrentamiento el pasado viernes. Harrison, de 30 años, destruyó a King en el evento Invicta FC 43 de la MMA hasta el punto de llegar a decir que ‘no quería golpearla más’.

Harrison ganó el combate por un devastador KO pero antes se encargó de destrozar la cara de su contrincante, que acabó ensangrentada. Pese a dureza de la secuencia, el árbitro de la contienda decidió que no había motivos para parar la lucha.

Harrison dominó desde el principio, destrozando a su oponente con una serie de patadas hasta llegar el brutal codazo que destrozó la cara de su rival. El golpe le provocó un gran corte en la nariz y Courtney King no paró ya de sangrar en todo el combate, tiñendo de rojo la totalidad de la lona. A pesar de ello, la pelea siguió reabriendo la herida antes de que el árbitro Marcio Laselva diera por finalizado el combate y decretara su victoria por nocaut técnico.

Las espeluznantes imágenes de la pelea han corrido como la pólvora en redes sociales e incluso Harrison admitió que estaba sorprendida de que la pelea no se detuviera. “Me sorprendió la cantidad de sangre que había y que no se detuviera la pelea porque literalmente estaba resbalando en sangre. “Fue como resbalón y deslizamiento. Fue repugnante”, aseguró.

Pero sin duda el momento más impactante llegó cuando la luchadora norteamericana admitió que había llegado a probar la sangre de su rival en uno de los forcejeos: “Me lamí los labios y pensé “Oh Dios, acabo de beber su sangre”.