¡Hala Madrid!: ¡Basta de poner la otra mejilla!

Muchos padres con sus niños, casi todos con la camiseta del Madrid, esperaban la llegada de los jugadores y de su presidente, Florentino Pérez. La emoción crecía por momentos. Efi se encargaba de todo, repartiendo banderas blancas a los pequeños para recibir a los protagonistas. De repente, un niño de 11 años gritó: «¡Papá, ese es el coche de Florentino!». Así era. El presi estuvo diez minutos firmando autógrafos y haciéndose fotos. «¡Ficha a Neymar», «¡Trae a Lewandowski!», escuchó.

Estamos dentro

El salón era enorme y resonaba la canción de la Décima. Cada uno de los 600 madridistas tenía una bandera en una preciosa estampa. Madridismo puro. Delante de la mesa presidencial, el trofeo que acredita al Madrid como Campeón del Mundo. Efi cedió la palabra a Florentino, que intentó arrancar, pero interrumpido, aclamado al grito de «¡Presidente, Presidente!». Tras esto, habló de forma contundente. Relajado, pero muy consciente del mensaje que iba a lanzar: «Quieren romper nuestra unidad, pero hay que estar fuertes». Al madridismo le ha dolido lo ocurrido tras el penalti de la Juve. ¡Basta ya de poner la otra mejilla y de permitir continuos ninguneos! Florentino actuó como lo hubiera hecho cualquier aficionado de la calle. Porque sí, hay muchos que quieren dividir al madridismo.

Keylor y Nacho

Keylor Navas y Nacho Fernández fueron los jugadores del primer equipo que acudieron al acto, y recibieron el calor de todos. Al tico le gritaron «¡el mejor portero del mundo!» porque la afición está con él pese a los rumores constantes en la portería. Y Nacho, madridismo en vena, recibió una tremenda ovación. Profeta en su tierra (nació y vive en Alcalá de Henares, donde se celebró el evento), lo agradeció: «Me siento como en casa. Es un orgullo estar aquí cada día, porque estoy feliz».