Duelo

Pogacar y Vingegaard ensayan para el Tour en la París-Niza

Los ganadores de las tres últimas ediciones de la carrera francesa han arrasado en el comienzo de la temporada

Pogacar y Vingegaard, una pareja inseparable
Pogacar y Vingegaard, una pareja inseparableYOAN VALATAgencia EFE

Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard se han desafiado en la distancia hasta ahora con la vista puesta en el Tour. España ha sido el escenario, aunque todavía no se han cruzado esta temporada. El esloveno se exhibió en la clásica Jaén Paraíso Interior antes de ganar con facilidad en la Vuelta a Andalucía. Ha ganado casi cada día que se ha puesto un dorsal. Con una superioridad insultante para sus rivales, además.

Pogacar eligió el sur de la Península para estrenar la temporada sin que nadie discutiera su dominio. Vingegaard prefirió el norte, las carreteras gallegas de O Gran Camiño castigadas por la nieve, pero el resultado fue parecido al de Pogacar. Dominio absoluto, incluida la contrarreloj final en las calles de Santiago.

Los ganadores de los tres últimos Tours se han lanzado mensajes desde la distancia. Amenazas que se harán reales en la París-Niza que comienza hoy. Ocho días de carrera con dos finales en alto y una contrarreloj por equipos. Un ensayo perfecto para el Tour a cuatro meses de la carrera francesa.

«Pogacar querrá demostrar que él es el jefe. La París-Niza es realmente un mini Tour de Francia, con llegadas en alto, con una contrarreloj pero también con etapas llanas con viento», asegura el director del Tour, Christian Prudhomme.

El ganador de los Tours de 2020 y de 2021 se presenta casi solo, con un equipo potente, pero más pensado para el llano que para acompañarlo y protegerlo en los finales de la cuarta jornada y de la séptima, la etapa reina en la que debe quedar decidida la carrera. Ni Adam Yates ni McNulty ni Marc Soler estarán con el «jefe» en las carreteras francesas. Correrán la Tirreno-Adriático junto a Joao Almeida.

Pero Pogacar está acostumbrado a pelear en solitario, hombre a hombre, o en una lucha de uno contra todos. Esta es la primera vez que se enfrenta con el hombre que lo bajó del primer escalón del podio en París después del pasado Tour de Francia.

La pelea entre el ganador y el segundo del último Tour en la París-Niza es algo que no se veía desde 1994, cuando Miguel Indurain y Tony Rominger se encontraron en esta carrera.

Y los dos llegan en un impresionante momento de forma para estas alturas de la temporada. Pogacar se impuso en la clásica jienense con final en Baeza y en tres etapas de la Vuelta a Andalucía, además de la general. Vingegaard ganó las tres etapas que el mal tiempo permitió finalizar en O Gran Camiño.

El Tour se proyecta esta semana camino de Niza.