El futuro es de Bale

El galés renueva con el Real Madrid hasta 2022 para convertirse en uno de los emblemas del club. A sus 27 años, pasará su madurez futbolística en el conjunto blanco.

El Bale que llegó al Real Madrid tras un largo verano de 2013 que no parecía acabar nunca era un futbolista a la espera: llegaba desde la Premier, no conocía el idioma, no había competido en un equipo de tanto nivel como el Real Madrid y los 91 millones pagados por él parecían pesar en todas las jugadas que hacía. Introvertido, se pegó a Modric, al que conocía del Tottenham, para aclimatarse cuanto antes. Le costó hacerse con un grupo que llevaba tiempo conviviendo y que había hecho la pretemporada sin él. Han pasado tres años y el Madrid y el futbolista de Gales han renovado su confianza hasta el verano de 2022, cuando Bale esté a punto de cumplir los 33 años. Él está a gusto en el equipo y en España, donde disfruta de la buena temperatura, y en el Madrid consideran que la importante apuesta que se hizo por él se ha visto respondida.

Estrella y mediático

En la Asamblea le preguntaron a Florentino Pérez por qué no había un director deportivo en el Real Madrid. El presidente contestó que prefería fichar un jugador de gran calidad a cinco buenos pero peores. Explicó que para fichar a los «cracks», a los jugadores que marcan la referencia, lo más importante es haber conseguido el dinero para pagar su precio. No hay muchos futbolistas de esos: están Messi y Cristiano. Y Bale y Neymar. Por eso el club blanco desembolsó una cantidad que hace tres años parecía exagerada, pero que, comparado con lo que pagó el Manchester United por Pogba este verano, no asusta ya a nadie. Bale tiene un doble valor: como futbolista y como jugador con gran recorrido desde el punto de vista de márketing. Ya en la Premier su mercado abarcaba todo el mundo. Con su llegada al Real Madrid las dos partes crecieron.

Deseado

El dinero ha inundado el fútbol inglés, que ahora busca que lleguen las estrellas. Pero hasta ahora, es la Liga española la que consigue mantenerlas. Habrá que ver qué sucede en el futuro, cuando los frutos económicos se empiecen a ver y los conjuntos ingleses compitan con la misma fiabilidad con la que lo hacen, por ejemplo, Madrid, Barça y Atlético en Champions. Por eso el Madrid quería asegurar el futuro de su futbolista. Tiene una edad en la que le quedan más de cinco años de fútbol y la buena imagen que dejó en Inglaterra se ha visto reforzada por su papel estas últimas temporadas en el conjunto blanco. Todos los veranos saltan rumores: la renovación es el paso para evitarlos.

Pareja de Ronaldo

Hace muchos años, el Madrid se planteó fichar a Ibrahimovic, pero no llegó a intentarlo por una razón: no quería que se alterase de más la plantilla. Hay que respetar las jerarquías y todos tienen que tener claro qué lugar ocupan. El ego del jugador sueco es superior a su talento y ya hay suficientes egos en un vestuario de la élite del fútbol. Con Bale, en el club se estaba convencido de que no iba a suceder algo así. Bale nunca ha dado un problema de protagonismo. Quizá porque va a lo suyo, sin importarle lo que se publica o se dice o porque hace que no se entera. El caso es que nunca ha discutido que Ronaldo es el futbolista estrella del Real Madrid y que él es su mejor acompañante. Al principio, Bale era algo individualista en momentos delicados, pero ha madurado también en esas situaciones.