El Mamelodi Sundowns de Sudáfrica se midió en la madrugada de hoy ante el Ulsan Hyundai de Corea del Sur, en el Camping World Stadium de Orlando por la primera jornada del Grupo F. Lo que parecía de inicio un partido con poco protagonismo, terminó convirtiéndose en el foco de todos los reflectores.

No solo bastó con los apenas 1.000 aficionados que acudieron al estadio (batiendo récords de inasistencia), ni con la fiesta que armaron durante todo el encuentro. El juego fue suspendido durante poco más de una hora por una alerta meteorológica emitida minutos antes del inicio. Las autoridades del torneo, en coordinación con el cuerpo arbitral y servicios de emergencia, tomaron la decisión como medida preventiva ante la posibilidad de tormentas eléctricas.

Sin embargo, dentro de la cancha surgió como un rayo Iqraam Rayners quien, aunque fue víctima de la anulación de dos tantos, consiguió anotar un tercero que le valió el triunfo al conjunto africano, el primero de la historia en esta competición, y que hoy lo tiene liderando su grupo, por encima de Fluminense y Borussia Dortmund.

En 2016, el Mamelodi compitió en el Mundial de Clubes (con el formato anterior), pero había pasado sin pena ni gloria cayendo en sus dos partidos, el primero ante el Kashima Antlers (Japón) y el segundo en el duelo por el cuarto y quinto lugar ante el conjunto surcoreano Jeonbuk Hyundai Motors.

Hoy ya puede dejar en el olvido el amargo recuerdo de su primera competición mundialista y comenzar a pensar en el Borussia Dortmund, con el que se medirá en la segunda jornada y ante el que podría certificar su pase a octavos. Además, el entrenador portugués, Miguel Cardoso, nuevamente podrá apostar por la terna latina: los brasileños Lucas Ribeiro y Arthur de Oliveira, así como el chileno Marcelo Allende, claves en esta primera victoria.

El club más rico y dominante del fútbol africano

Pese a que el Mamelodi Sundowns fue fundado en 1970, por varios años pasó como un club modesto con poco protagonismo, hasta 2004, cuando fue adquirido por el millonario Patrice Motsepe, quien pertenece a una de las familias más adineradas del mundo y es el presidente de la Confederación Africana de Fútbol.

El magnate africano en 2003 se hizo con el 51% del equipo y un año después compró el 49% restante. Desde entonces comenzó a moldear el club a su gusto y, aunque los trofeos tardaron en llegar, hoyson el conjunto más laureado del fútbol sudafricano con 31 títulos nacionales, 22 desde que lo adquirió Motsepe, y 3 internacionales, todos dentro de la nueva administración.

Además, lleva ocho ligas consecutivas ganadas y en 2016 conquistó la Champions africana, misma hazaña que estuvo a punto de repetir hace dos semanas, pero cayó ante el Pyramids de Egipto con un global de 3-2.

Patrice Motsepe ha sido incluido varias veces en la revista Forbes por contar con una de las mayores fortunas del planeta. Se estima que acumula cerca de 3.000 millones de dólares, siendo el noveno del ranking en el continente africano. La mayor parte de su dinero proviene de las minas de oro.

Con jugadores que rondan los 2,8 millones de dólares, como el brasileño Lucas Ribeiro, e inversiones que han dado estabilidad al equipo, el club se mantiene como uno de los mayores protagonistas del fútbol africano y se prepara para escribir su historia en el Mundial de Clubes 2025.