Primera División

Leganés

Victoria Pavón: «No he conocido a ningún presidente galáctico»

Victoria Pavón / Presidenta del CD Leganés.. Se puso al mando del club hace ocho años, en Segunda B y con una situación económica complicada. Tras dos ascensos, el equipo ha pasado de campos «pequeños y humildes» a visitar el domingo al Madrid en el Bernabéu. «Un día grande», afirma

Victoria Pavón. Presidenta del CD Leganés.
Victoria Pavón. Presidenta del CD Leganés.larazon

La presidenta del CD Leganés se puso al mando del club hace ocho años, en Segunda B y con una situación económica complicada. Tras dos ascensos, el equipo ha pasado de campos «pequeños y humildes» a visitar el domingo al Madrid en el Bernabéu. «Un día grande», afirma

María Victoria Pavón sólo se ha perdido dos partidos en los ocho años que lleva como presidenta del Leganés, uno por una gripe y otro por la muerte de su padre. Se emociona al recordar un mensaje que recibió nada más ascender a Primera. «Sois un ejemplo para nosotros», decía el texto de un directivo de un equipo que desde Segunda B soñaba con repetir el camino del club pepinero, acostumbrado a «campos, pequeños y humildes», pero que el domingo visita el Santiago Bernabéu.

–¿Jugar en este estadio es la mejor prueba del trabajo bien hecho?

–Nos enfrentamos a uno de los mejores equipos del mundo. Vamos a ver a nuestros jugadores jugar en el Bernabéu. Es un día grande y un orgullo para el Leganés, es histórico.

–¿Ha imaginado ganar allí?

–No estoy pensando en el resultado, pero me gustaría que compitiéramos y diéramos una buena imagen. Con el potencial que tienen es muy complicado.

–¿Cómo se llega a ser presidenta del Leganés?

–Pues casualmente. Entramos como accionistas en el club para echar una mano en una situación complicada y empezaron a decir que yo sería la presidenta. En principio lo vi una idea descabellada, porque nunca había pasado algo así por mi cabeza. No me decidí hasta el final y pensé «¿por qué no?». Podía aportar lo mismo que cualquiera, no me veía en un nivel inferior.

–¿Imagina ahora su vida sin esta ocupación?

–No da tiempo a pensarlo. No hay tregua ni entre temporadas, no hay espacio ni para reflexionar. La fuerza nos lo ha dado el ir consiguiendo cosas. Casi todo lo que hemos vivido ha sido bonito y nos hemos ido metiendo hasta ocupar el cien por cien de nuestro tiempo y no dejar casi espacio para lo más elemental de tu vida.

–¿El fútbol absorbe más que otros negocios?

–No deja de ser una empresa, pero tiene matices totalmente diferentes. Al final no es un compromiso sólo de trabajo, es también a nivel sentimental. Se juntan muchos sentimientos y, aunque soy una persona bastante equilibrada que no se deja llevar por las euforias, a veces no se puede evitar. Te hace sentirte muy viva. He aprendido mucho y me siento preparada para todo este aluvión.

–¿Se ve como una especie de salvadora de un club que iba camino de desaparecer?

–Es un éxito de la ciudad de Leganés, no lo veo como algo mío. Ver la ilusión de la gente es lo que más satisfacción te crea. No me siento como salvadora de nada. Lo hemos conseguido todos, no yo.

–¿Qué le dicen por la calle?

–Te dan la mano y te dicen gracias. Es lo que más me llega, pero también te carga de responsabilidad. Antes de ascender pensaba que había que conseguirlo, aunque sólo fuera un año. Y ahora ya te agarras a la ilusión de alcanzar la permanencia. Sientes como que defraudarías a alguien si acabamos descendiendo.

–¿Tiene más colores además del blanquiazul?

–Me siento más cercana al Atlético porque mi hijo jugó siete años allí, pero no se puede decir que sea del Atleti. Lo que no soy es anti nada, es una tontería.

–¿Cómo es su relación con los jugadores?

–Muy cercana y natural, siempre he viajado con el equipo. Hablamos de la novia, de los niños, de lo que tengan.

–¿Le va a pedir a Florentino que le ceda a Mariano para el mercado de invierno?

–Algo caerá, se lo pienso decir, sí. Creíamos que los clubes grandes nos podrían ayudar más con las cesiones y no ha sido así.

–¿Qué es lo más raro que ha escuchado en un palco?

–Conoces a distintos tipos de personas y a gente que merece la pena. Todo normal. Tenía asimilado que en otra época los directivos venían del mundo de la empresa, de niveles muy altos, muy galácticos. Pero los presidentes son gente que viene a salvar las situaciones, muy parecidos a nosotros. Lo que sí veo diferente es que ahora te encuentras con muchas nacionalidades. Árabes en el Málaga, chinos en Granada y Valencia... Todavía no he conocido a ningún presidente galáctico, en el comportamiento al menos.

–Su marido, vicepresidente, su hijo, director deportivo... ¿Cómo desconectan del fútbol?

–Lo vamos consiguiendo. Al principio cada comida era todo fútbol. Ahora cuando nos reunimos intentamos hablar de otras cosas y dejar la pelota al margen.

–¿El fútbol es machista?

–Desde dentro, no. Te tratan con respeto y hay muchas mujeres en las directivas. Hay bastante normalidad.