PGA Tour

Woodland se alza en la quema de Fowler y Rahm

No pudo ser finalmente, y el mano a mano que se esperaba entre Rickie Fowler y Jon Rahm en el desenlace del Waste Management Phoenix Open no se produjo, o al menos no entre ellos, ya que los protagonistas fueron otros diferentes: Chez Reavie y Gary Woodland

Gary Woodland, con el título
Gary Woodland, con el títulolarazon

Los aficionados esperaban que uno de sus hijos pródigos, Jon Rahm, terminara de completar un torneo fantástico poniéndole la guinda con una victoria ante Rickie Fowler, haciendo que se levantaran en el 16 con un gran golpe y que, en el 18, cogiera el trofeo con las dos manos, pero no pudo ser.

Tampoco lo consiguió Fowler y es que tanto el español como el norteamericano se vinieron abajo, no sabemos si por la presión o por qué, pero lo cierto es que a los dos les costó un mundo terminar su recorrido teniendo en cuenta los excelentes registros de días previos. Fowler, que partía como líder, se fue a los 73 golpes en un final complicado para él, con bogeys en el 15, 16 y 17 que le hicieron claudicar, mientras que Rahm, esta vez no se encontró demasiado agusto desde el tee; ronda de 72 con tres birdies y cuatro bogeys.

Su juego largo, al igual que en el inicio del primer día, no encontraba esa vía de efectividad que suele y se dedicó más a salvar y defenderse que a poder atacar, intentando mantener la línea, no marchándose demasiado, y siempre con opciones, teniendo en cuenta que su compañero de partido tampoco carburaba.

Lo siguió intentando, tirando a matar, siempre al centro de la diana, pero en ese juego de riesgo esta vez la suerte no estuvo con él y sumo bogeys en el 12, el 15 y el 16 que terminaron de finiquitar un mal final, al tiempo que subían como la espuma desde atrás Chez Reavie y Gary Woodland.

Como si todos los errores de Jon y Rickie se convirtieran para ellos en acierto, los dos yankees enchufaban una y otra vez birdies sin contemplación para terminar en el 18 empatados tras vueltas de 64 para Woodland (nueve birdies y os bogeys) y 66 para Reavie (eagle, cuatro birdies y bogey), cimentados ambos en los primeros nueve, especialmente.

Los dos cohetes terminaron empatados y tuvieron que jugárselo en el desempate del 18, un par cuatro en el que Woodland estuvo más acertado y consiguió salvar el par, mientras que Reavie se fue algo largo y terminó con bogey, estrechando la mano al ganador y en parte decepcionado por pelear tanto y terminar sin victoria.

Una victoria que cierra heridas

Por su parte, Woodland miraba al cielo, lloraba y daba las gracias. Hace apenas un año, el pasado 29 de marzo, tras conocerse que su mujer iba a dar a luz a gemelos, perdió a uno de ellos, a una niña, algo que les sumió en tristeza; afortunadamante el otro pequeño, Jaxson, sí sobrevivió al parto, y en este Waste Management Phoenix Open acompañó a su madre y a su padre en la celebración. Woodland no podía ocultar su felicidad y seguro que le da fuerzas para los próximos compromisos.

Del resto de contendientes, decir que Phil Mickelson concluía en el quinto puesto con 69 impactos, mientras que Daniel Berger caía al T1 con 71 golpes y otros como Patton Kizzire (70 y T31), Bubba Watson (72 y T40), Keegan Bradley (72 y T43) o Ian Poulter (75 y T52), también caían posiciones.

@golfcom / Golf Confidencial