Motociclismo

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Tito Rabat: «En MotoGP tendré que cambiar mi método»

El campeón de Moto2 en 2014 visitó ayer la redacción de LA RAZÓN
El campeón de Moto2 en 2014 visitó ayer la redacción de LA RAZÓNlarazon

Después de ganar de forma brillante el título de Moto2 en 2014, el año 2015 no ha sido tan fácil para Tito Rabat como algunos esperaban. Reconoce que le pesó el número, pero también que las caídas y los problemas para adaptarse a la moto le han servido como aprendizaje para el gran reto que afronta en MotoGP. Tras conseguir su corona de la categoría intermedia prefirió esperar a tener un proyecto sólido para dar el salto, algo que va a hacer en 2016 con el objetivo de estar entre los diez primeros. «Nunca me he arrepentido, porque no tenía una buena oferta. Ahora gracias a CSM, la compañía de «management» que me lleva, he conseguido un muy buen contrato con una moto oficial, con un gran equipo, y sí veo una cosa con cara y ojos para, al menos, intentar hacer el máximo y tratar de tener el mismo material que los primeros a mi disposición».

Tito se hizo daño de verdad este curso en la muñeca, que todavía tiene inflamada, y en la clavícula, así que el primer paso es desconectar y descansar: «No sé cuál es mi récord de tiempo seguido sin coger la moto, pero seguro que lo voy a superar este invierno», bromea en su visita a LA RAZÓN. Llega con un peinado nuevo, más moderno, y con la ilusión de hacerlo muy bien con una Honda, en principio, «igual que la que tienen Marc y Dani Pedrosa. Luego habrá que ganarse que lleguen las piezas a través de los buenos resultados. Habrá que apretar desde el principio, pero con cuidado, que es el primer año y estas motos corren mucho», añade.

Estos días ha estado alejado de la gasolina, «haciendo vida normal en Almería y saliendo con los amigos de vez en cuando para desconectar». Un respiro antes de que empiece el nuevo año y lleguen los test de pretemporada. Hay mucho trabajo por delante, porque la categoría reina es otra historia. «Hay que adaptar la cabeza a la velocidad de la MotoGP, que es mucho mayor. El cuerpo no descansa, porque las rectas se hacen más cortas que en Moto2. Aquí es todo más intensivo, más bestia y más exigente física y mentalmente. También más divertido, ya que el piloto tiene mucho más que decir. En Moto2 el límite se encuentra muy rápido. En MotoGP, me queda mucho para encontrar el límite», explica.

Rabat es famoso por dar más vueltas que nadie en cada entrenamiento. Ahora, igual va a tener que dejar de ser un «corredor de fondo». En MotoGP tendré que cambiar mi método. Menos vueltas y apretar más desde el principio. Si das muchas, acabas reventado. Hay que hacer pocas, pero bien concentrado. Si no, llegas sin fuerzas para el domingo. Hay que dosificar mucho más que en Moto2», insiste. Será el único «rookie» el próximo curso junto a los mejores y está convencido de que podrá hacerlo bien y de haber elegido el mejor momento para asaltar la categoría reina.