Tenis

Stakhovsky, de la raqueta al kalashnikov

El tenista que derrotó a Federer en Wimbledon en 2013 y llegó a ser el número 31 del mundo se ha enrolado en la defensa de Kiev. Su compatriota Svitolina donará el dinero que gane en Monterrey al ejército de su país

Sergiy Stakhovsky, en la línea del frente en Kiev
Sergiy Stakhovsky, en la línea del frente en KievTwitter

Hace poco más de un mes Sergiy Stakhovsky (6-1-1986, Kiev) estaba en Melbourne peleando por colarse en el cuadro principal del Abierto de Australia. No lo logró, cayó en la primera ronda de clasificación y decidió que era el momento de la retirada. Con 36 años, el tenista ucraniano que derrotó a Roger Federer en la segunda ronda de Wimbledon hace nueve años (6-7, 7-6, 7-5 y 7-6) ha decidido cambiar la raqueta por el kalashnikov. Se ha enrolado en el ejército de su país y está en Kiev defendiendo la capital.

Stakhovsky no fue un cualquiera en el circuito ATP. Llegó a ser el número 31 del mundo, levantó cinco títulos individuales y una docena en dobles. Su particular diario de la guerra le ha convertido en un fenómeno viral. En sus últimas publicaciones apuntaba que sus compatriotas están animados y que de rendirse nada de nada. En una de sus últimas imágenes aparece con un edificio bombardeado de fondo y un mensaje muy directo: «Putin, bailaremos sobre tu tumba».

«Sé usar un arma, si tengo que utilizarla, lo haré», fue la declaración con la que Stakhovsky anunció su ingreso en el ejército. Su residencia habitual está en Budapest y allí ha dejado a su mujer, Anfisa, y a sus hijos. «Ha sido una decisión horrible», dijo a la BBC sobre la decisión de abandonar Hungría. «Aún no sé cómo lo he hecho. Está siendo muy difícil para mi mujer porque mis hijos ni siquiera saben que estoy aquí. No entienden qué es esto de la guerra. Son demasiado pequeños para saberlo. Se creen que me he ido a jugar un torneo». Y continúa: «Es un gran apoyo para nuestro ejército que sientan que no están solos, al menos desde la perspectiva de los medios, pero también tenemos que ser realistas. Han sido ocho años de guerra con Rusia, así que ¿dónde ha estado toda esta cobertura durante ese tiempo?». Stakhovsky no es optimista ante el futuro inmediato: «Ninguno pensó que esto podría pasar y ha ocurrido. Ninguno de los líderes de Europa o del mundo está listo para ayudar, para luchar en Ucrania por una Europa mejor para el futuro. Si Ucrania cae, nosotros resistiremos. Pero, siendo sinceros, Rusia tiene una población de 140 millones de personas, que va desde Europa hasta Alaska. Va ser imposible resistir mucho».

El único jugador capaz de derrotar a Federer antes de los cuartos de final de Wimbledon en los últimos 20 años no es el único tenista de su país implicado en la defensa ante la invasión rusa. Elina Svitolina se encuentra en Monterrey y su intención era no disputar el torneo mexicano. En primera ronda, la número 15 del mundo se iba a enfrentar a la rusa Anastasia Potapova. Iba a renunciar a la competición, pero cambió de opinión. La ucraniana había advertido que no jugaría contra ninguna rival de Rusia o Bielorrusia a menos que compitieran como neutrales y sin ningún símbolo de su país. Potapova se ajustó a las condiciones planteadas por los organismos internacionales y perdió por 6-2 y 6-1. «Esta victoria es especial por lo que estamos pasando en Ucrania, es aterrador. Han pasado seis días y todos los tenistas ucranianos y los ucranianos que están allí estamos aterrorizados con lo que está sucediendo». Svitolina va a donar al ejército de su país todo el dinero que gane en Monterrey. «Estoy jugando por mi país y para ayudar al ejército ucraniano y a las personas necesitadas. Cada victoria que obtenga será muy especial. Creo que mi misión es unir a nuestra comunidad del tenis para apoyar a Ucrania porque lo que estamos pasando es algo horrible».