Djokovic confiesa quién es el nuevo jugador favorito de su hijo... y es español

Novak Djokovic debutará en segunda ronda del Mutua Madrid Open ante Gael Monfils. Dos clásicos del circuito frente a frente en la Caja Mágica. El paso por Madrid del serbio está siendo relativamente anónimo. La “Alcarazmanía” y la “Nadalmanía” presiden un torneo en el que el serbio ha dejado buena muestra de sus progresos en castellano. El número uno del mundo, que pasa largo tiempo en Marbella, confesó ayer quién es el nuevo jugador favorito de su hijo mayor, Stefan. “Mi hijo sabe quién es Nadal y también quién es Alcaraz también. En los últimos meses, después de Navidad, para mi hijo Nadal ya no es el número uno. Ahora el número uno para él es Alcaraz. Cambió de jugador favorito. Imita los golpes en la cancha cuando juega. Imita la derecha de Rafa cuando juega. Es lindo porque Nadal y yo hemos compartido muchos años en este deporte y tenemos muy claro nuestros roles para inspirar a los jóvenes, para motivarlo para que jueguen. Dar un poco de ilusión para ellos”, aseguró Djokovic.

La jornada también sirvió para que el de Belgrado se entrenase precisamente con Carlos Alcaraz. La presencia del murciano en la pista siete de entrenamiento de la Caja Mágica desató la locura entre el público, que acudió en masa a verle durante la media hora que ensayó con Djokovic. Cientos de personas acudieron a ver el entrenamiento de Alcaraz, una de las estrellas del Mutua Madrid Open, al que no pararon de aplaudir y corear su nombre para brindarle todo su apoyo antes de su debut en la capital española.

La festividad en la Comunidad de Madrid propició que miles de aficionados acudieran a disfrutar del tenis en la Caja Mágica dispuestos a ver a sus ídolos. Alcaraz ya es uno de ellos, como quedó patente al término del entrenamiento, cuando el murciano se acercó al público y durante casi diez minutos estuvo firmando autógrafos en pelotas, gorras y toallas. Alcaraz congregó a un buen número de aficionados y curiosos en su entrenamiento. El aforo de la pista se quedó pequeño. Todos los asientos estuvieron ocupados y, tras la valla, las personas a pie se agolparon en tres y cuatro filas. El que no recibió ni un solo guiño de complicidad por parte de la afición española fue Djokovic, que no contó con el calor de los asistentes, que no le dedicaron ningún aplauso y se marchó de la pista sin firmar autógrafos.

Las tormentas que cayeron en Madrid desde primera hora de la tarde provocaron la suspensión momentánea durante algunos minutos de la jornada pese a que las tres pistas principales del torneo cuentan con techo retráctil.