Tenis

Nadal tiene el número uno del mundo a tiro (aunque no lo persiga)

Pese a que recuperar el trono no sea un objetivo como tal, Rafa tiene serias opciones de volver a la cima tras el US Open o en lo que queda de año, con Alcaraz también en la pelea

Rafa Nadal y Carlos Alcaraz están en la pelea por el número uno del mundo en 2022
Rafa Nadal y Carlos Alcaraz están en la pelea por el número uno del mundo en 2022Emilio NaranjoAgencia EFE

Alcaraz sonríe y bromea con Sinner, su verdugo, pese a perder en Umag su segunda final consecutiva, después de haberse impuesto en las cinco primeras que había disputado. Tenía que llegar algo así y eso lo sabían desde el entorno más cercano del tenista. «No ha hecho su mejor juego porque durante la larga temporada no se puede estar siempre al cien por cien, pero ha sido competitivo y ha llegado al cuatro del mundo», dice Antonio Martínez Cascales, fundador de la academia JC Ferrero Equelite, donde Alcaraz se ha hecho como tenista, y que acompañó al murciano en Umag. Carlitos está en un proceso –él más todavía con lo joven que es– y ha tenido que pasar de ir a los torneos con la ilusión simplemente de estar, a ser el centro de atención, una de las imágenes, el principal favorito, el que tiene que salir en las fotos... «Los últimos meses han sido complicados puesto que cumplió 19 años en mayo y los cambios en todos los sentidos han sido muy grandes: conocer gente famosa, compromisos, reconocimientos...», prosigue Cascales. «Llegará el momento de tener más tranquilidad y asumir todo esto e incluso filtrar un poco sus compromisos que no sean de trabajo, porque el tenis a este nivel es muy exigente. Aunque entendiendo que la gente, los amigos, los medios siempre están ahí», añade. Todo ha ido rápido y se estabilizará. Su próximo desafío es la pista dura norteamericana y el US Open.

Carlos es el cuatro del mundo y desde ahora no defiende demasiados puntos en la lucha por la clasificación ATP. Sí en Nueva York, donde se dio a conocer al mundo entero el año pasado al llegar a cuartos, pero no en los Masters 1.000 anteriores, reflejo de lo que le ha cambiado la vida: en el de Canadá no participó porque no tenía ranking y en el de Cincinnati fue superado en primera ronda después de pasar la previa. La ATP reparte unos puntos en función a la ronda a la que se llegue en cada torneo que caducan a las 52 semanas, por eso se habla de defender lo logrado el año pasado para sumar o no perder. El no haber jugado tanto en 2021 mete a Carlos en la pelea por el número uno de aquí a final de curso, aunque todavía esa no sea el objetivo prioritario que tiene en mente. Defiende 35 puntos en Cincinnati, 90 en Winston Salem (no va a ir este año), 360 en el US Open, 90 en París-Bercy, 180 en Viena y 10 en Indian Wells (en 2021 se celebró en fecha rara por la pandemia). Si tiene una actuación excelente seguirá subiendo, sin límites...

Número uno en el aire

Porque el número uno está muy en el aire y con muchos pretendientes. La clasificación ahora dice:

  • 1. Medvedev, 7.625 puntos
  • 2. Zverev, 6.850
  • 3. Nadal, 6.165 puntos
  • 4. Alcaraz, 5.035
  • 5. Tsitsipas, 5.000
  • 6. Djokovic, 4.770

Rafa, en el fondo, es quien lo tiene mejor para sentarse en el trono. Se trata de una pelea que desde hace tiempo le es ajena, pero si llega será un bonito premio. El balear no jugó la campaña pasada estos torneos por la lesión en el pie y por eso el panorama es prácticamente de sólo sumar, mientras sus rivales tienen obstáculos. Con un final de temporada bueno o incluso regular podría regresar a la cima, aunque eso no va a variar un ápice su calendario, que de momento es Montreal y el US Open. Sólo defiende 45 puntos en Washington, que perderá el lunes, y 500 en Canadá, arrastrados de 2019 por las circunstancias especiales de la pandemia. Por hacer una cuenta final: si gana en Nueva York será número uno salvo que Medvedev roce la perfección y conquiste Los Cabos (donde está ahora), Cincinnati, Montreal y sea finalista del US Open. Y se quedarían al lado. Eso sólo este mes. Las posibilidades seguirían creciendo en los próximos. En realidad, si el año pasado hubiera podido jugar con normalidad lo lógico sería que ya fuera número uno tras conquistar dos Grand Slams.

La desgracia de Djokovic

Djokovic se ha visto perjudicado porque en Wimbledon no se han repartido puntos por el boicot a los jugadores rusos y porque en Australia no jugó por el lío que se montó al no estar vacunado. Además, ahora no puede ir al US Open, por lo que perderá los 1.200 puntos de finalista de 2021 y no podrá sumar. Defiende otros 1.000 en París-Bercy y 600 de las ATP Finals. Está casi descartado para acabar 2022 de nuevo como el mejor.

El número uno actual es Medvedev y está muy obligado por los grandes resultados del año pasado: ganó en Canadá (1.000 puntos), semis en Cincinnati (360), campeón del US Open (2.000) y finalista en París (600) y en las ATP Finals (1.000). Repitiendo eso, que seguro que firmaría, se quedaría con los puntos de ahora. Él mismo ha reconocido que está pendiente de esa pelea en la clasificación y que lo normal es que “Rafa acabe el año como número uno”. “Pero puedo mantenerlo durante bastante tiempo”, añadió.

A Zverev, el dos del mundo, le lastra la lesión que se hizo en París. Antes del US Open, perderá 1.090 puntos de Cincinnati y Canadá porque no va a participar. Tampoco se sabe si llegará a Nueva York, donde ya podría haber sido rebasado por Nadal. Además, tiene que defender, entre otras cosas, su título en las ATP Finals (1.300 puntos).

Tsitsipas, con un total de 990 puntos que defender, también está en la lucha, en una situación similar a la de Alcaraz.