Los emplazamientos de telecomunicaciones ubicados sobre puntos con fácil emisión (azoteas o parcelas de terreno elevadas) y que alojan toda su infraestructura en torres o mástiles con antenas, son un punto neurálgico sobre el que se sustenta la actividad de las operadoras.

Sin embargo, a medida que aumenta su número, y la infraestructura crece en volumen y complejidad, su gestión se está haciendo más difícil. Se calcula que, actualmente, hay más de 5 millones de emplazamientos (torres, estaciones base o sites) a lo ancho de todo el planeta –que podrían multiplicarse hasta por siete de la mano del 5G– cuyo coste de mantenimiento anual unitario ronda los 25.000 euros. En España, existen más de 45.000 emplazamientos. La pandemia no ha hecho más que acelerar un proceso que era inevitable.

Sin embargo, si bien el ritmo es imparable, sí se pueden evolucionar las herramientas específicas para cada parte del proceso con el fin de que funcionen con una mayor integración y visibilidad entre ellas. Para ello, Minsait, una compañía de Indra, apuesta por la transformación digital mediante el desarrollo de una plataforma centralizada que facilite una visión 360 grados en tiempo real de todas las actividades implicadas en el ciclo de vida de los emplazamientos. Esta es una de las iniciativas que recoge la compañía en su informe «Gestionando eficientemente los activos de telecomunicaciones».

La creciente y necesaria inversión en espectro e infraestructuras capaces de albergar y satisfacer los requerimientos de las nuevas tecnologías, está llevando a las empresas del sector de telecomunicaciones, a buscar soluciones de ahorro de costes y a la identificación de nuevas fuentes de ingresos. En este sentido, cualquier pequeña mejora puede tener un impacto relevante dado el volumen de negocio. De hecho, la comunidad TowerXChange ha estimado que se puede llegar a optimizar hasta un 30% de los costes de gestión de emplazamientos como, por ejemplo, mejorando la eficiencia energética, lo que tendría ya un impacto en las cuentas del operador de red o de las infraestructuras.

Minsait señala que el uso de una plataforma centralizada permitiría mejoras inmediatas como la eliminación de tareas manuales no integradas entre sí, la reducción de los errores producidos por el aumento de emplazamientos y procesos, y la mejora de la rentabilidad del emplazamiento. Así, los propietarios de las infraestructuras consiguen una administración más eficiente de sus activos, y de su relación con otros proveedores y empresas, mientras que permite la gestión de contratos con clientes, y sus solicitudes de recursos, en base a los espacios disponibles para comercializar. Además, estas soluciones permiten mejorar la toma de decisiones gracias a la disponibilidad de la información en tiempo real y también sistematizar el conocimiento de la operación sin tener que depender de una persona.

Por otro lado, la optimización de la gestión de los emplazamientos favorece un mantenimiento más eficiente y una mejora de la calidad de servicio, así como de la experiencia, lo que redunda en un beneficio para los usuarios finales.

«Monetizar infraestructuras»

Hasta hace unos años eran los propios operadores los que se encargaban de gestionar integralmente los emplazamientos, pero la creciente inversión en infraestructuras por la aparición de nuevas tecnologías (5G, Fibra Óptica, IoT…), los problemas legales y administrativos que acarrean la construcción y mantenimiento de los emplazamientos, así como la aparición de nuevos actores en el sector, han llevado a las compañías de telecomunicaciones a buscar otras soluciones. Entre ellas, destacan la compartición de infraestructuras entre varios operadores para abaratar costes, o la segregación de activos para maximizar la rentabilidad, ésta última, mediante la creación de compañías de infraestructuras controladas por las operadora matriz y acuerdos con TowerCos y FiberCos (operadoras neutras de infraestructuras).

Para Minsait, las plataformas centralizadas suponen también una importante palanca para impulsar estos nuevos modelos de gestión y negocio puesto que permite ir sumando a nuevos actores para que participen en su administración. En concreto, se espera que aquellas empresas que requieren alta conectividad con sistemas de fibra o radioenlaces (manufactura, química, automóvil…), compañías de logística que usen drones y necesiten bases para operar o, incluso, aquellas que puedan ofrecer servicios de IoT y Edge Computing (aprovechando los emplazamientos como Data Centers), puedan convertirse en nuevos partners en el corto plazo.

La clave para la construcción de esta solución de gestión inteligente es la evolución desde el uso de herramientas específicas para cada proceso a la creación de una plataforma centralizada que disponga de un único punto de entrada común. Así, los usuarios, en función de su rol, podrán acceder a la gestión de procesos comerciales y de operación y mantenimiento de los emplazamientos.

Minsait incide además en la necesidad de contar con un inventario de activos unificado de cada emplazamiento para su correcta actualización, así como la incorporación de soluciones en movilidad para la gestión de incidencias y órdenes de trabajo en campo. De este modo, gracias al uso de aplicaciones móviles, el técnico está «geolocalizado» al tiempo que puede visualizar órdenes de trabajo o ejecutar tareas de forma guiada mientras realiza auditorías o mantenimientos.

Por otra parte, se destaca también la aportación de las tecnologías de análisis de datos y la inclusión de algoritmos de machine learning para descubrir ineficiencias y desarrollar capacidades predictivas. Dado el contexto actual de pandemia, se recomienda también habilitar soluciones que faciliten el trabajo a distancia, como la monitorización de equipos y el control de acceso en remoto.

Por último, y de cara al futuro de los emplazamientos, cada vez es más importante todo lo relacionado con la sostenibilidad, especialmente con la reducción de la huella medioambiental. En este sentido, los llamados greenfield, emplazamientos de torres situados en el suelo, irán ganando peso, ya que van a permitir la optimización del consumo energético sin necesidad de estar ubicados en espacios interiores y usando soluciones de energía alternativa como la solar, o baterías, con rectificadores más eficientes.