Ahorro
CaixaBank prevé que el consumo crezca un 5,7 % en 2022 y se modere un 3,6 % 2023
Las clases medias y altas aún retienen parte de los 46.000 millones de ahorro forzoso acumulado durante 2020
El consumo privado se ha reactivado con fuerza convirtiéndose en uno de los pilares de la recuperación. Sin embargo, aún no está fluyendo todo el exceso de ahorro forzoso generado durante las restricciones de 2020 y de parte de 2021. La incertidumbre generada por el impacto de la sexta ola de Covid y su variante ómicron podría retener todavía más parte de ese capital pese a lo cual CaixaBank Research ha pronosticado que el consumo seguirá creciendo en España en los próximos dos años, pero de forma moderada, con subidas del 5,7 % en 2022 y de alrededor del 3,6 % en 2023. Siempre que la vacunación logre evitar nuevas restricciones de actividad y movilidad.
El informe toma como referencia la evolución del consumo de los hogares, principal componente del PIB y tradicionalmente considerado unindicador de la salud de la economíay del bienestar de la sociedad tras el desplome sufrido por la pandemia. Caixabank Research resalta el riesgo que suponen amenazas como el aumento de los precios de la energía y los cuellos de botella en las cadenas globales de distribución que -considera el informe- irán desinflándose a medida que transcurra 2022.
“A medida que vayan remitiendo durante 2022, creemos que la demanda embalsada durante la pandemia, la recuperación del mercado laboral, la mejora de la confianza del consumidor, el mantenimiento de unas condiciones financieras acomodaticias y el impulso que supondrán los fondos Next Generation EU seguirán sustentando la recuperación del consumo”, apunta el informe.
CaixaBank Research remarca que el impedimento para consumir muchos servicios durante las restricciones en 2020 y la consecuente generación de ahorro forzoso -que estima en unos 46.600 millones de euros, el 3,7 % del PIB de 2019- está espoleando el consumo tras la reapertura de la actividad.
Según la entidad, el ahorro forzoso durante la pandemia ha sido sustancial, pero muy heterogéneo: la distribución del exceso de ahorro entre las rentas bajas, medias y altas ha sido del 4%, el 58% y el 38%, respectivamente, y se concentra sobre todo en las personas de más de 60 años.
En estos momentos, sostiene el análisis, el ahorro acumulado ya se está deshaciendo en un 100% en el caso de rentas bajas, en un 67 % en las medias y en un 36 % en las altas, lo que está repercutiendo de forma positiva sobre el turismo, el ocio y la restauración.
Por otro lado, el documento constata que los consumidores suelen gastar más durante la primera semana del mes y que este patrón es especialmente acusado entre las rentas bajas y los jóvenes, mientras que los mayores de 60 años y las rentas altas acostumbran a gastar de forma más uniforme.
Debido a los cambios en los patrones de consumo, la inflación a la que hizo frente el consumidor medio en 2020 fue del 0,1 % y aún mayor para las persones de más de 60 años y de rentas bajas, según los datos de la entidad.
✕
Accede a tu cuenta para comentar