Sociedad más desigual

El 10% más rico en España gana ocho veces más que el 50% más pobre

La crisis de la covid ha aumentado las desigualdades y ha disparado la riqueza de los multimillonarios. La riqueza de las 520.000 personas que componen el selecto grupo del 0,01% de los más adinerados del mundo representa el 11% del total

Las colas del hambre, lejos de desaparecer, se cronifican en las calles de grandes y pequeños municipios
Las colas del hambre, lejos de desaparecer, se cronifican en las calles de grandes y pequeños municipiosJesús G. FeriaLa Razón

Las crisis tambalean los cimientos de la economía de un país y deslizan los estratos de la sociedad con menores ingresos hacia posiciones de mayor precariedad. Mientras, la población más acomodada apenas nota los efectos del seísmo. Esta es la tendencia que se repite crisis tras crisis y que se ha perpetuado una vez más en 2021 por los efectos financieros de la Covid-19, según la segunda edición de su estudio comparativo publicado este martes por el Laboratorio de las Desigualdades Mundiales que coordinan economistas como Thomas Piketty y Gabriel Zucman. El informe refleja que las personas que forman parte del 10% más rico de la población en España ganan de media ocho veces más que las que forman parte del 50% más pobre, una brecha que pese a todo es de las menos pronunciadas en el mundo y a un nivel similar que la de otros países del entorno europeo.

El estudio explica que el ingreso medio de un adulto en 2021 en España es de 30.600 euros, casi el doble de los 16.700 a nivel mundial. De ese total, los ingresos del 10% más favorecido representan un 34,5% del total del país, un porcentaje superior al de otros vecinos europeos como Francia (32,2%) e Italia (32,2%), y sobre todo más elevado que el de Estados nórdicos como Suecia (30,8%) y Noruega (29,6%). Pero ese 10% se lleva una parte del pastel más importante en el Reino Unido (35,7%) y Alemania (37,1%), por no hablar de lo que ocurre fuera de Europa. En Estados Unidos suponen un 45,5% y en Brasil un 58,6%.

Los autores del informe señalan que en la línea con otros países europeos, las desigualdades de ingreso en España eran más fuertes a comienzos del siglo XX (el decil superior concentraba más del 50%) y bajaron al 35% en los años 1960. En las últimas cuatro décadas, ese porcentaje se ha mantenido a un nivel relativamente estable, con algunos altibajos en los tiempos más recientes: la crisis financiera redujo significativamente las entradas de dinero para la mitad de la población más pobre entre 2008 y 2014 y solo en 2015 se recuperó el nivel anterior a 2007.

El 10% más rico concentran el 58% de todos los bienes y activos

Si hablamos de riqueza y no de ingresos, las diferencias se pronuncian aún más en todo el mundo, incluido en España. El 10% de la población más rica en España concentra en 2021 el 57,6% de todos los bienes y activos (por un valor medio de 1.014.100 euros) mientras que la mitad inferior se contenta con un 6,7% (por valor de 23.500 euros). El peso relativo del 10% más rico ha crecido algo este año (suponía un 57,4% en 2020), mientras se ha mantenido sin cambios el del 50% menos favorecido. En este sentido, España se sitúa de nuevo en niveles similares a los de otros países europeos. El 10% más rico es propietario del 47,7% de los activos en Italia, del 59,5% en Francia, del 59,6% en Alemania o del 57,1% en el Reino Unido.

La riqueza de las 520.000 personas que componen el selecto grupo del 0,01% de los más adinerados del mundo (multimillonarios) ha crecido en términos relativos este año -marcado por la efervescencia de los mercados financieros- hasta representar el 11% del total mundial, mientras que el 50% de los más pobre solo es propietario de un 2% de los activos.

Brecha de género: las mujeres perciben el 40% de las rentas del trabajo

Por lo que se refiere a las diferencias de género, las mujeres perciben en España el 40% de las rentas de trabajo, un porcentaje ligeramente superior al de la media en Europa occidental (38%), pero se queda por debajo de Europa oriental (41%). En términos globales, el estudio muestra que las mujeres perciben menos del 35% de los ingresos de trabajo, y que teniendo en cuenta que en 1990 ganaban cerca del 30%, el progreso en estos tres decenios ha sido “muy lento”, señalan los autores.

Los ricos contaminan cinco veces más

Los responsables del estudio también hacen notar que los ingresos y la riqueza están directamente vinculado con las emisiones de dióxido de carbono (CO2), el principal gas causante del efecto invernadero. En España, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) por habitante se sitúan en 8 toneladas, por encima de Portugal (6 toneladas) pero por debajo de Francia (9 toneladas). Mientras que el 50% de los españoles con menos recursos generan de media 4,6 toneladas de CO2, el 10% más rico emite cinco veces más, en concreto 21 toneladas por persona. Si nos referimos a los multimillonarios del mundo, el 0,01% de la población más rica es responsable del 11% de esas emisiones. Por ello, Thomas Piketty y Gabriel Zucman consideran que las políticas climáticas como las tasas de carbono tendrían que ir dirigidas de forma mucho más selectiva contra las personas más favorecidas económicamente.

Medidas para paliar estas desigualdades

Los responsables del Laboratorio de las Desigualdades Mundiales insisten en que todas estas fracturas no son inevitables, sino consecuencia de decisiones políticas y se pueden corregir. Su principal propuesta para conseguirlo es un impuesto progresivo a los multimillonarios de todo el mundo que, con un tipo medio del 1% sobre la riqueza, permitiría recaudar el equivalente del 1,6% de los ingresos mundiales para ser reinvertidos en educación, sanidad y en la transición ecológica.