La crisis del sector del automóvil desploma un 3,3% la producción industrial en octubre

La escasez de suministros provenientes sobre todo de Asia está perjudicando de manera grave al sector del automóvil dentro de la industria española. Tanto es así que la falta de microchips está generando paralizaciones en la mayoría de los 17 centros de fabricación establecidos en nuestro país.

Es por ello que no sorprende que la producción industrial haya registrado en octubre una caída del 3,3% respecto al mismo mes de 2020, siendo una de las primeras bajadas de este indicador desde el mes de febrero y 4,2 puntos inferior a la de septiembre.

Así lo corroboran los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los cuales apuntan que este indicador encadenaba ya siete meses consecutivos de crecimientos motivado por la comparación con el ejercicio anterior en el que la producción industrial se vio gravemente afectada por la pandemia.

En este retroceso de un 0,9% frente a la tasa interanual registrada en septiembre contribuyó la rama de la actividad de “Fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques”, que sufrió una contracción del 35,1 %.

Estas cifras se ven marcadas por las dificultades existentes en algunos sectores industriales a escala global para acceder a materias primas y otros productos como pueden ser los semiconductores, sacudiendo de especial manera a la producción de vehículos.

Por lo tanto, industrias electrónicas de vanguardia se encuentran en competición en todo el mundo y centros de producción se está viendo obligados a retrasar la fabricación, una situación que, según las previsiones de todos los fabricantes, podría prolongarse hasta bien entrado en año que viene.

Durante los diez primeros meses del año, el índice de producción industrial (IPI) acumuló una subida media del 7,6% respecto a 2020, cuando en ese mismo período registraba una disminución del 10,9 %.

Por sectores, y tras las correcciones de efectos estacionales y de calendario, la mayor caída en octubre la protagonizó la producción de bienes de equipo con un descenso del 11,7 %, seguida por los bienes intermedios, con una bajada del 3,5 %.

No obstante, por el contrario, la fabricación de bienes de consumo repuntó un 2,1 %, debido a los “no duraderos”, ya que los “duraderos” también retrocedieron, y la de energía aumentó un 0,4 %.

Por otro lado, los datos por ramas de actividad reflejaron en octubre el desplome de la producción en el sector del automóvil cayeron los fabricantes de material y equipo eléctrico (14 %), el textil (13,5 %) y el sector de caucho y plásticos (10,1 %). Mientras que la confección de prendas de vestir aumentaron un 23,4%; el refino de petróleo y la industria del cuero y el calzado subieron un 16,9% y 14,2% respectivamente.

Por Comunidades Autónomas, el líder en crecimiento en este mes respecto a 2020 fue Baleares con un 22,5% seguido de Asturias con un 6,3%, Andalucía con un 1,8%, Canarias con un 1,3%, País Vasco con un 1% y Castilla-La Mancha se mantuvo estable. Tan solo cinco de las 17 regiones evolucionaron de manera positiva. Por el contrario las autonomías con mayores descensos en octubre se dieron en Castilla y León (15,8 %) y Aragón (11,7 %)