Hacienda retrasará la reforma fiscal por la guerra pero puede aplicar medidas ‘antidumping’ contra Madrid

Con tres día de retraso, pero los expertos designados por el Gobierno para abordar la reforma del sistema fiscal español entregarán hoy sus conclusiones y propuestas y explicarán en rueda de prensa las principales conclusiones del mismo. Ahora será el turno del Gobierno para desarrollar e impulsar la reforma para su posterior aprobación por parte del Congreso de los Diputados.

Por tanto, expertos y Ejecutivo deberán calibrar adecuadamente el momento económico actual y el esperado a medio y largo plazo, por lo que el actual contexto marcado por la invasión de Ucrania por parte de Rusia y por una muy probable espiral inflacionista, que se trasladará al crecimiento económico y al empleo, pueden aplazar algunas ideas iniciales. «Las medidas deben ser, por tanto, compatibles con la recuperación económica tras la pandemia y deberán tener en cuenta el compromiso de España con la consolidación fiscal», explicaron fuentes ministeriales.

No en valde, la propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ya ha avisado en varias ocasiones de que la aprobación de la reforma fiscal podría retrasarse más allá de 2023, que es lo que se contempla en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, si no se ha recuperado el crecimiento económico previo a la pandemia, ya fuera por el covid o ahora por Ucrania.

Eso sí, la ministra no descarta adelantar solo algunas medidas y apostar por aplicar ya «de forma más coordinada» la fiscalidad sobre la riqueza entre los distintos territorios para garantizar un nivel de imposición «mínimo y coordinado, evitando la competencia fiscal perjudicial entre las comunidades autónomas». Por tanto, al menos la ministra si implementará las medidas para acotar lo que califica de «dumping fiscal» de la Comunidad de Madrid, sobre todo por los impuestos de Patrimonio y Sucesiones en Madrid, prácticamente inexistentes.

Montero ya ha incidido en varias ocasiones en que hay que evitar que, a nivel autonómico, se dejen «vacías de contenido» algunas figuras fiscales «como ha sucedido en algunas comunidades». Pretende mejorar la recaudación y la eficiencia del sistema fiscal a través del «ensanchamiento» de las bases tributarias, «reducidas por las numerosas exenciones y deducciones» de las regiones.