Energía

Díaz critica la bonificación general a la gasolina mientras exige ayudas para el transporte público

La rebaja sería de 10 euros tanto en el urbano como en el interurbano. Reclama un “impuesto extraordinario” sobre los beneficios de las eléctricas.

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, atiende a los medios durante un desayuno informativo en Madrid
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, atiende a los medios durante un desayuno informativo en MadridMariscalAgencia EFE

Bonificaciones “discriminadas” por capacidad económica, ayudas directas al transporte público y un nuevo “impuesto extraordinario” sobre los beneficios de las compañías eléctricas para paliar el impacto de la guerra de Ucrania. Estas son las nuevas propuestas lanzadas ante los periodistas por Yolanda Díaz, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, que ha asegurado que ya se están negociando ya entre los dos socios de Gobierno, PSOE y Podemos. “No es comprensible que en una región como Madrid el transporte público no esté bonificado y, sin embargo, lo estén la gasolina o diésel para todo el mundo sin discriminación”.

Aunque no quiso facilitar detalles sobre la posible cuantía de esas reducciones de precios, según adelantó la propia ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, se habría planteado una reducción del precio del abono de transporte público de 10 euros en todas sus modalidades, tanto urbano como interurbano.

Díaz, que ha hecho estas declaraciones durante su asistencia a un desayuno organizado por Nueva Economía Fórum, ha pedido que estas medidas deben incluirse o modificarse del decreto anticrisis que tiene previsto prorrogar el Gobierno hasta el 30 de septiembre y del que forma parte la bonificación de 20 céntimos al combustible para todos los ciudadanos. Díaz ha vuelto a criticar que se siga bonificando de forma general los combustibles y se ha mostrado partidaria de “discriminar” quiénes reciben esta bonificación y de no fomentar el uso de los hidrocarburos. Ha insistido en lo “incomprensible” que resulta bonificar la gasolina o el diésel y no hacer lo mismo, por ejemplo, con el transporte de trenes Cercanías o de Metro.

También ha insistido en que ha llegado el momento de incorporar un impuesto extraordinario a las eléctricas. “Nunca había pasado en democracia una enorme transferencia de las rentas de la ciudadanía a las eléctricas por los precios de la energía”, ha criticado. “Las eléctricas tienen que comprometerse con España y no es nada extraordinario, lo están haciendo muchos países (...) para compensar tienen que aportar los que más tienen”, ha reclamado.