El alquiler, desencadenado: las rentas se disparan ya a doble dígito en quince capitales de provincia

La espiral alcista del precio del alquiler no encuentra techo por ahora. Después de que cayeran durante la pandemia por el incremento de la oferta y la reducción de la demanda, las rentas se han recuperado con fuerza y no paran de subir. En octubre, tres fuentes estadísticas diferente, el INE, Fotocasa y Pisos.com, apuntan en este sentido.

La estadística oficial de la inflación refleja que los alquileres se incrementaron el mes pasado un 1,7% en comparación con el mismo mes del año pasado, lo que constituye la subida más acusada desde septiembre de 2010. Se trata del undécimo incremento consecutivo desde el 0,% que subió en diciembre pasado.

Más importantes son los incrementos que reflejan las estadísticas de Fotocasa y Pisos.com, del 4% y del 3,85%. Ambas recogen, además, las crecientes dificultades que existen para conseguir una vivienda en alquiler en las capitales de provincia. Fotocasa asegura que los precios se han disparado a doble dígito en el último año en quince de estas ciudades, mientras que Pisos.com las deja en 14. Fotocasa contabiliza subidas, incluso, por encima del 20% en los caos de Málaga (26,9%), Alicante (23,5%) y Valencia (23,3%). En Barcelona, también lo roza con el 19,9%. En el caso de Pisos.com, sólo constata una subida por encima del 20% -20,98%- en Alicante.

Causas

Detrás de este sostenido y poderoso incremento de precios subyace el importante desequilibrio entre oferta y demanda que arrastra el mercado del alquiler. «El mercado en las rentas se encuentra en una situación de ajuste, intentando absorber la gran demanda surgida en estos últimos meses», explica María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa. Buena parte de esta demanda proviene de rebotados del mercado de compraventa que, incapaces de acceder a una vivienda en propiedad por los problemas para conseguir financiación, tienen que recurrir al alquiler. Pero no es la única causa de este desequilibrio. Idealista viene reportando un descenso muy acusado de la oferta en los últimos trimestres, del 32% en el segundo y del 25% en el primero; que presiona todavía más al alza los precios.

Detrás de esta caída hay, según idealista, cuestiones como los cambios legislativos que, según asegura, han desincentivado la inversión en alquiler. Aunque no son los únicos. Parte del parque de vivienda vacacional que durante la pandemia se reconvirtió en alquiler convencional por las restricciones a viajar ha vuelto de forma paulatina a su origen, drenando así viviendas que han dejado de estar disponibles. Sin olvidar, añade Matos, que “el furor de la compraventa de estos dos años también ha ocasionado que los propietarios viesen un buen momento para vender y han retirado viviendas del alquiler”.

La consecuencia de este incremento de precios es que la tasa de esfuerzo, el porcentaje de ingresos que se destina al pago de la renta, también se esta disparando y ya supera el 30% recomendado en 17 capitales de provincia, según idealista.