Impuestos

El aguinaldo de Navidad puede ir con multa: ¿cuándo se tiene que declarar a Hacienda?

La Agencia Tributaria presta atención al dinero en metálico que circula durante las celebraciones, sobre todo a las grandes cantidades

En lo que va de año, solo se ha concedido el 1% de las ayudas presupuestadas
En lo que va de año, solo se ha concedido el 1% de las ayudas presupuestadaslarazonEUROPA PRESS - ARCHIVO

Navidad es sinónimo de regalos. Un obsequio que nunca falla es el dinero en forma de aguinaldo. Con la alegría de recibir esa “paguita”, son pocas las personas que se plantean si hay que rendir cuentas a Hacienda por las cantidades. Si los perceptores se quieren ceñir a la norma, deberían el dinero en metálico como donaciones. Ante los ojos de la Agencia Tributaria, el dinero regalado en efectivo “es una forma de que el Gobierno pierda el rastro”, como apunta Elisabeth Ruiz Dotras, profesora de Economía y de la Empresa de la UOC, experta en finanzas. Durante los últimos años, se ha ido persiguiendo con fuerza el blanqueo de capitales en España, pero ¿cuál es la cantidad mínima a declarar?

Tributar en el IRPF o en el impuesto de sucesiones

Ante la ley, como subraya Dotras, “cualquier dinero que recibas, ya sea una transferencia o en efectivo, es una cantidad que se tiene que tributar en un impuesto u otro. IRPF si es por la recompensa de tu trabajo o un rendimiento del capital, o bien impuesto de sucesiones si recibe a través de donaciones”. Ahora bien, como recuerda esta experta, son dos impuestos distintos y también gestionados por diferentes organismos: “El IRPF lo gestiona el Estado, mientras que el de donaciones y sucesiones lo determina cada comunidad autónoma”, comenta. No obstante, a juicio de Dotras, toda donación en metálico ante la ley debería declararse. “Y no hace falta que sea un aguinaldo de Navidad, sino que todos los regalos de bautizos, aniversarios o bodas también son susceptibles a tributarse”, incide.

Si se ingresan más de 3.000 euros, el banco informa a Hacienda

Así, el aguinaldo se debería tributar. Y es indiferente si la persona lo recibe en efectivo o vía transferencia bancaria o bizum. “Si te lo dan en efectivo y lo guardas en tu casa no hay trazabilidad, es como el dinero negro no declarado. Pero a la que si lo ingresas en el banco, ya empieza a haber un registro y es cuando Hacienda llama podría llamar a la puerta”, indica Dotras. De hecho, si se ingresan o retiran 3.000 euros o más, el banco está obligado a informar a Hacienda. Con la cual cosa, si el aguinaldo es de menos de 3.000 euros “no tienen por qué informar y puede pasar más desapercibido, aunque eso no quiere decir que no te lo encuentren”. Así que todo aquel aguinaldo de 3.000 o superior puede ser más perceptible ante los ojos de Hacienda.

¿Qué pasa con los aguinaldos de 50 euros?

Los aguinaldos de 50 o 100 euros que, de hecho, son los más comunes, también se deberían declarar ante la ley: “La normativa estatal no hace distinción de cantidades, sino que estipula que todos se deben declarar”, asevera Dotras. Pero también reconoce que “nadie lo hace, ni Hacienda lo persigue, porque sería muy complicado tener este control tan exacto”.

Los billetes de 500 euros están controlados

Otro punto de vista que hay que tener en cuenta con este tipo de regalos son los billetes de 500. “Los billetes de 500 están controlados, por ejemplo si pides cambio en el banco apuntan tu DNI antes de darte el dinero, con la cual cosa Hacienda sabe quien utiliza estos billetes y dónde”, explica esta experta. Por lo tanto, en este caso, aunque el aguinaldo sea menor a 3.000 euros, pero compuesto de billetes de 500, “tienen mayor riesgo a ser perseguidos por la administración”, concluye Dotras.