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Camacho lamenta que el PP sufra en Cataluña tras padecer en el País Vasco

Cospedal y Sánchez-Camacho, ayer, en la Convención del PP
Cospedal y Sánchez-Camacho, ayer, en la Convención del PPlarazon

Triste porque el clima social y político cada vez es más tenso en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho lanzó ayer un mensaje de contrariedad porque las posiciones del PP son cada vez más difíciles de sostener debido a la creciente imposición de las tesis soberanistas. «Nos quieren decir cómo tenemos que vivir nuestra vida y educar a nuestros hijos. O estás con ellos o no eres catalán. Y esto lo hemos vivido en otras partes de España», dijo la presidenta del PP catalán en alusión al País Vasco durante el discurso de inauguración de la convención de los populares que hoy clausurará Mariano Rajoy.

La efervescencia del independentismo fue dominante a lo largo de la jornada celebrada en el Palau de Congresos de Barcelona, donde se concentraron numerosos pesos pesados del PP. Sánchez-Camacho abrió el fuego y lo hizo con el ánimo de reafirmar las convicciones de un partido que se sabe en tierra hostil dentro de la Cataluña oficialista. «Somos un partido que ha sufrido mucho en el País Vasco y en muchos puntos de España. Ahora estamos sufriendo, de manera diferente, con la exclusión y el rechazo social en Cataluña», lamentó.

Harta del discurso dominante en la mayoría de instituciones catalanas, la presidenta del PP catalán reivindicó el derecho de mostrar sin complejos sus ideas. «No quiero vivir en una Cataluña sin libertad, en la que sólo tienen derecho a opinar los independentistas. Sólo quiero decir alto y claro que mi mejor manera de sentirme catalana es sentirme española», clamó entre los aplausos de sus compañeros.

Dicho esto, arremetió contra el proyecto independentista de CiU y ERC, y lo contrapuso al modelo del PP. «Ante los que quieren una Cataluña aislada, encerrada en sí misma y pequeña porque la quieren controlable, nosotros queremos una Cataluña plural, líder en España y con una España fuerte en Europa», dijo.

Según subrayó Sánchez-Camacho, el PP es «la garantía de seguir siendo catalanes, españoles y europeos». «Este partido va a evitar que nadie nos saque de España y de Europa. Queremos trasladar a todos los españoles que Cataluña no es independentista, que no hay una mayoría separatista», afirmó.

Las «mentiras»

Tras la intervención de la presidenta del PP catalán tomó la palabra María Dolores de Cospedal, que también arremetió contra CiU y ERC por «mentir» a los catalanes prometiéndoles que una Cataluña independiente sería «un territorio más rico, más próspero, sin paro, sin deuda o sin déficit». «Se engaña cuando se dice que hay estudios que lo avalan porque no hay estudios serios que avalen estas quimeras», aseguró la secretaria general del PP.

De hecho, Cospedal advirtió de que el supuesto Estado catalán «nacería en quiebra», ya que sería incapaz de pagar las pensiones a los jubilados. Tras advertir de los riesgos de la independencia, la número dos del PP salió en defensa de la unidad de España. «No se le puede dar un mordisco a España porque sí, porque a un gobernante le interesa en un momento concreto ya que no sabe qué puede hacer con el desastre de gestión que tiene ante sí», afirmó.

La dirigente popular tomó el hilo del sufrimiento del PP en Cataluña para mostrar su reconocimiento a sus compañeros. «No es sencillo mantener la bandera de la unidad, la de todos los españoles, no es fácil», dijo.