La Comisión Europea dio a conocer el viernes al grupo IAG, al que pertenece Iberia, sus objeciones sobre la adquisición de Air Europa tras llevar a cabo una investigación, tras la cual considera que los pasajeros podrían tener que hacer frente a un "aumento de los precios, a una disminución de la calidad de los servicios y a una disminución de la competencia".

Iberia cree que estas conclusiones son habituales en los procesos de competencia para operaciones complejas, y ya tenían en el punto de mira que la Comisión percibiera que la transacción puede suponer efectos adversos en varias rutas por la reducción del número de aerolíneas que operarían en ellas. En todo caso, consideraron que "la competencia estará garantizada porque IAG y Air Europa siempre se enfrentarán a otros operadores fuertes, ya sean otras aerolíneas, trenes de alta velocidad o ambos".

Iberia insistió en que su propuesta es "sólida" y confía en lograr una solución "definitiva" y con "todas las garantías para los consumidores" tras las objeciones expresadas por la Comisión Europea a la fusión con Air Europa. "Tal y como esperábamos, la Comisión considera que esta operación puede suponer efectos adversos para la competencia en varias rutas, tanto domésticas y europeas como rutas a América, principalmente por la reducción del número de aerolíneas que operarían en ellas", explicaron fuentes de Iberia tras conocer el documento.

El proceso entra ahora en los "meses decisivos" durante los que la Comisión evaluará las soluciones ('remedies') que la compañía está planteando. "Nuestra propuesta es muy sólida y creemos que logrará responder a todas las preocupaciones de la Comisión. Como ya avanzó Marco Sansavini, presidente ejecutivo de Iberia, supone la cesión a otros competidores del 40% de los vuelos que operó Air Europa en 2023 con el compromiso de que ninguna ruta quede operada exclusivamente por Iberia y Air Europa".

Las mismas fuente consideraron que "continuamos trabajando con la Comisión para acercar posturas y acordar una solución definitiva que permita llevar a cabo esta operación fundamental para el impulso de la conectividad y de la economía de España con todas las garantías para los consumidores. Solo una competencia sana entre los hubs del sur y el norte de Europa y la consolidación de la aviación en nuestro continente permitirán a Europa competir de igual a igual con Norteamérica, Asia y los países del Golfo".

Como ya avanzó su presidente ejecutivo, Marco Sansavini, la operación implica la cesión a otros competidores del 40 % de los vuelos que operó Air Europa en 2023, con el compromiso de que ninguna ruta quede operada exclusivamente por Iberia y Air Europa.

IAG quiere comprar el 80% del capital de Air Europa que todavía no controla por 400 millones de euros a través de una operación que fue notificada oficialmente a las autoridades europeas el pasado 11 de diciembre. Se trata del segundo intento para obtener luz verde de la Comisión después del abandono de un primer acuerdo en 2021.