Industria ferroviaria

Más presión para la OPA de Talgo: la compañía considera "probable" casi doblar su cartera de pedidos en el corto plazo

La empresa tiene una carga de trabajo de 4.000 millones y ve factible conseguir otros 3.500 no a mucho tardar

Economía.- Magyar Vagon pone en duda la viabilidad de su OPA sobre Talgo si el Gobierno retrasa su aprobación, según UGT
Operarios de Talgo en su fábrica de Las Matas (Madrid)Europa Press

Talgo se encuentra al límite de su capacidad productiva, según han asegurado sus sindicatos y ha reconocido el propio ministro de Transportes, Óscar Puente. Y es esta situación la que hace temer a los trabajadores que no sea capaz de sacar adelante los encargos que ya tiene y pujar por otros nuevos y el motivo por el que han pedido al Gobierno que busque una solución rápida a la oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por el consorcio húngaro Ganz-MaVag Europeo una alternativa que le permita incrementar su actividad fabril.

Mientras la cuestión sobre la propiedad de la compañía se resuelve, en Talgo la maquinaria no se detiene y su equipo directivo trabaja en más encargos. Hasta el punto de que, a pesar de sus limitaciones de producción, considera factible duplicar su cartera de pedidos en el corto plazo.

Fuentes del sector aseguran que, durante la conferencia con analistas celebrada el martes para presentar los resultados del primer trimestre de 2024, periodo en el que ganó cuatro veces más, 10,4 millones; el consejero delegado de Talgo, Gonzalo Urquijo, aseguró que considera probable que la compañía se adjudique contratos por valor de 3.500 millones en próximas fechas.

Actualmente, la cartera de pedidos del fabricante español está en máximos históricos por encima de los 4.000 millones de euros, por lo que otros 3.500 supondría casi duplicar la carga que tienen sus factorías de Las Matas (Madrid) y Rivabellosa (Álava).

Tanto los sindicatos como Puente, así como otras fuentes del sector, consideran obvio que Talgo necesita incrementar esta capacidad. Sin embargo, el Ejecutivo no considera que el consorcio húngaro aporte una solución válida a este respecto. Puente ha asegurado públicamente que "no tenemos claro que las fábricas de Hungría [que tiene Ganz-MaVag Europe y que suman más de medio millón de metros cuadrados] puedan adaptarse a la tecnología de Talgo y resolver sus problemas". "No es lo mismo tener una fábrica ahí, bueno, pues medio vacía, con una mano de obra acostumbrada, por ejemplo, a amolturar, que la tecnología de soldadura de aluminio. No parece que sea eso tan fácil de hacer en Hungría como se dice", ha justificado.

Objetivos

Talgo ha puesto sus miras en diferentes proyectos que es encuentran ahora mismo en diferentes estados de maduración. La compañía está negociando con las autoridades búlgaras un contrato para el suministro de veinte nuevos trenes eléctricos de un solo piso. En un principio, competía con la china CRRC, que se retiró de la puja tras abrirle la Comisión Europea una investigación por posibles ayudas de Estado. La oferta inicial de Talgo era de613 millones de euros.

Talgo también suscribió a comienzos de 2023 un contrato con Le Train, el primer operador privado de alta velocidad francés, para la adquisición de una futura flota de diez trenes de muy alta velocidad. El material rodante, basado en la plataforma Avril, tendría un coste aproximado de300 millones de euros.

La operadora pública saudí, Saudi Arabia Railway (SAR), también ha trasladado a la compañía su interés por adquirir veinte trenes de alta velocidad que sumar a los 35 con los que ya cuenta en la línea entre Medida y La Meca que opera Renfe. El trato no está cerrado, pero su monto podría a ascender a entre 700 y 800 millones de euros.

La empresa también tiene pendiente de firma un contrato para la construcción de siete trenes nocturnos en Egipto por valor de 280 millones de euros. Asimismo, en el norte de África, ha mostrado interés por el proyecto que ha lanzado Marruecos para adquirir material rodante de alta velocidad y larga distancia por valor de 760 millones de euros y cuyo calendario de entregas se extenderá a lo largo de cuatro años, entre 2027 y 2030. En este caso, Marruecos exigirá al ganador del concurso el establecimiento de un proyecto de desarrollo industrial, mediante la construcción de una fábrica en Marruecos y el desarrollo de un ecosistema ferroviario, formado por proveedores y subcontratistas, con ambición exportadora.

La compañía está pendiente de contratos en Bulgaria, Arabia o Marruecos

La semana pasada, Uzbekistán también anunció su intención de llamar a Talgo para establecer una comunicación ferroviaria entre Taskent y Jorezm, la línea ferroviaria Samarcanda-Bujará-Jorezm, así como para el transporte de pasajeros entre Bujará y la ciudad de Jiva, según explicó a Efe su viceprimer ministro de Uzbekistán, Achilbáy Ramátov. Actualmente, hay seis trenes de Talgo operando en este país.

Talgo está pendiente de la OPA presentada formalmente el 4 de abril por el consorcio húngaro, que cuenta con el visto bueno de los principales accionistas de Talgo, agrupados en Pegaso, donde están el fondo de origen británico Trilantic, la familia Oriol y Torreal, la sociedad de Juan Abelló, que ostentan el 40 %.

La empresa que lanzó la OPA es propiedad de un antiguo asesor del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, y se ha consolidado en el sector ferroviario a través de privatizaciones en aquel país. Detrás de este consorcio están DJJ y András Tombor, que fue consejero de asuntos de seguridad nacional de Orbán durante su primer Ejecutivo, entre 1998 y 2002.

La OPA es vista con recelo por el Gobierno español por el carácter estratégico del constructor ferroviario y por las posibles conexiones de los propietarios del grupo húngaro con capital ruso, según manifestó Puente.

El Gobierno estudia la operación en la Junta de Inversiones Exteriores (JINVEX), un órgano pilotado por la Secretaría de Estado de Comercio, cuyo informe será elevado al Consejo de Ministros, que debe autorizar, o no, la OPA.

Dado su descontento con la operación, el Gobierno está tratando de armar una contraopa de capital español liderada por Criteria, holding inversor de La Caixa.