Sección patrocinada por
Meteorología
Comienza la temporada de borrascas de alto impacto: la AEMET revela cómo se llamarán
Los países europeos se organizan entre ellos para darle un nombre a los fenómenos meteorológicos más adversos
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha anunciado a través de su cuenta oficial de X (antes Twitter) que la temporada de borrascas 2024-2025 comenzará mañana, domingo 1 de septiembre. El organismo público destaca que esta será la octava campaña en la que se asignarán nombres a las borrascas que generen un gran impacto y requieran la activación de avisos en amplias zonas. Además, la AEMET también ha publicado una pequeña guía donde explican en todo detalle cuál es el procedimiento para darle un nombre a estos fenómenos meteorológicos. Si quieres saber más, continúa leyendo:
¿Cómo se asigna un nombre a una borrasca?
Una borrasca es una perturbación atmosférica compleja que se manifiesta como un sistema de bajas presiones en latitudes medias, entre 30 y 60 grados. Caracterizada por la presencia de fuertes vientos y abundantes precipitaciones, este fenómeno meteorológico exhibe una circulación ciclónica, donde los vientos giran en sentido antihorario en el Hemisferio Norte. La intensidad de una borrasca está directamente relacionada con la magnitud de la caída de presión en su centro, lo que puede resultar en un gran impacto sobre bienes y personas cuando alcanza ciertos umbrales críticos.
El sistema europeo de nombramiento de borrascas
La Universidad Libre de Berlín ha sido la institución que ha liderado la iniciativa de asignar nombres a anticiclones y borrascas desde el año 1954. Desde entonces, esta metodología ha sido adoptada y adaptada por diversos países, que encontraron en ello una forma muy efectiva de comunicarse con la población en relación a fenómenos meteorológicos que podrían ser muy adversos, permitiendo una mejor preparación y respuesta por parte de la población y las autoridades competentes.
No todas las borrascas reciben un nombre. El criterio principal para nombrar una borrasca es su potencial impacto, no necesariamente la velocidad de su intensificación. Una borrasca puede ser nombrada si se prevé que causará condiciones meteorológicas severas, como fuertes vientos o lluvias intensas, que puedan suponer un riesgo o tener un gran impacto para la población, independientemente de si ha experimentado una ciclogénesis explosiva o no. Esto se hace para mejorar la comunicación y la atención del público sobre estos fenómenos meteorológicos potencialmente peligrosos.
El Grupo Suroeste
El sistema actual de nomenclatura para borrascas de gran impacto se implementó inicialmente con éxito durante las temporadas 2015–16 y 2016–17 en el Grupo Oeste europeo, compuesto por Reino Unido, Irlanda y Países Bajos. Posteriormente, en la temporada 2017–18, se extendió al Grupo Suroeste, que incluye España, Francia, Portugal, Bélgica y Luxemburgo. El Grupo Suroeste, al que pertenecemos, se encarga de nombrar las borrascas atlánticas y las del Mediterráneo occidental. Solo se designan aquellas que causarán condiciones climáticas severas en al menos uno de los cinco países del grupo.
Pero el nombramiento de borrascas es un esfuerzo coordinado que va más allá de nuestro continente. Cuando un grupo nombra una borrasca importante, se informa rápidamente a los demás grupos. La mayoría de los grupos usan el mismo nombre, excepto el Grupo Central, que utiliza la nomenclatura establecida por la Universidad Libre de Berlín. Esta sinergia se extiende además a organismos internacionales como la Organización Meteorológica Mundial y el Centro Nacional de Huracanes de Miami. De esta forma, todos los países trabajan juntos para identificar y seguir mejor las tormentas importantes, lo que puede mejorar las alertas y la seguridad.
¿Qué condiciones debe cumplir una borrasca para tener nombre?
En España, específicamente, las condiciones para nombrar una borrasca según el Plan Meteoalerta de la AEMET incluyen rachas de viento máximas superiores a 90, 100 y 110 km/h, dependiendo de la región. Este criterio puede flexibilizarse, permitiendo el nombramiento con avisos amarillos de viento (rachas máximas superiores a 70, 80 y 90 km/h) si se anticipan también precipitaciones intensas (avisos de nivel naranja o rojo).
¿Cómo se elige el nombre?
En cuanto al nombre que se utilizará para nombrar a cada borrasca, se hará siguiendo una lista preestablecida para la temporada. Esta lista incluye 21 nombres y se designan siguiendo un orden alfabético. Además, se alterna un nombre propio masculino y uno femenino.
La primera de ellas, Aitor, ha comenzado ya a generar numerosas bromas en las redes sociales:
"Aitor... menta. Sois unos cachondos", reza uno de los comentarios al post de X en el que la AEMET revela la lista de los nombres.
Específicamente, para la temporada 2024-2025 actual, los nombres designados son:
- Aitor
- Berenice
- Caetano
- Dorothea
- Enol
- Floriane
- Garoe
- Herminia
- Ivo
- Jana
- Konrad
- Laurence
- Martinho
- Nuria
- Olivier
- Pauline
- Rudiger
- Salma
- Timothee
- Vanda
- Wolfgang
En el caso particular de ciclones postropicales, se mantendrá el nombre asignado por el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Miami, añadiendo el prefijo "ex-".
✕
Accede a tu cuenta para comentar