Noches tropicales en pleno mes de enero: las increíbles temperaturas que se están registrando en España

El tren de borrascas que está afectando esta semana a todo el país ha venido acompañado de un ascenso de las temperaturas por la entrada de vientos templados procedentes del suroeste. Esta semana se han producido los días más calurosos de enero en varias zonas.

Así, Ceuta llegó este lunes a 23,4 grados de temperatura máxima, lo que supone el día de enero más caluroso desde 2004. Y el martes hubo 30,8 grados en el aeropuerto de Gran Canaria (récord de enero desde 1951); 29,9 en el aeropuerto de Fuerteventura (1967), y 28,7 en el aeropuerto de El Hierro (1974).

Cabe destacar que este martes hubo otros valores destacados que no suponen récord, con 31,7 grados de temperatura máxima en La Oliva (isla de Fuerteventura) y 22,5 de mínima en La Aldea de San Nicolás (Gran Canaria). Canarias ha vivido noches tropicales -es decir, cuando los termómetros no bajan de 20 grados- durante esta semana.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), amplias zonas de España tendrán estos días “temperaturas por encima de lo normal, más propias del mes de marzo” hasta que el viernes vuelvan las heladas al interior y el norte de la península.

Por la noche, las mínimas también han aumentado de forma casi generalizada. Los datos de la Aemet, recogidos por Servimedia, indican que ciudades situadas en 11 provincias y Ceuta han registrado un calor histórico inusual para un mes de enero.

La ciudad de Alicante vivió el martes noche más cálida en un mes de enero desde que hay registros, que comenzaron en 1854, con una mínima de 16,8 grados centígrados. Ese valor se recogió a las 23:59 horas y certifica la noche más cálida en una clasificación histórica donde en segunda posición está el 8 de enero de 1906, con una mínima de 16,6, el 29 de enero de 2021 (16,3) y el 6 de enero de 1848 (16,2).

Meteorología afirma que las mínimas en Castelló de la Plana y Alicante son las equivalentes a las de una noche normal de final de mayo o principio de junio y en el caso de la ciudad de Valencia a las de mitad de mayo.

El céntrico parque del Retiro, en Madrid, midió en la madrugada de ayer una temperatura mínima de 11,1 grados en lo que fue la noche más cálida en ese lugar desde que en 1920 comenzara la toma de datos. Y Cáceres registró una temperatura mínima de 13,1 grados (noche de enero más cálida desde 1983), Salamanca se quedó en 10,8 grados (desde 1979) y Ávila estuvo a 8,9 grados como mínimo (desde 1983). Además, la madrugada de este martes mejoró el récord de temperatura mínima más alta de este lunes en Ávila (9,0 grados) y Salamanca (12,0).

Se establecieron otras siete efemérides más de noche de enero más cálida jamás registrada, con 20,1 grados en el aeropuerto de Fuerteventura (récord desde 1967); 19,7 en el aeropuerto de Lanzarote (desde 1973); 12,4 en Toledo (1983); 11,6 en Albacete (1983); 11,3 en el aeropuerto de Salamanca (1945); 9,3 en Cuenca (1956), y 8,4 en Molina de Aragón (1951).

En ese sentido, el responsable del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante (UA), el catedrático Jorge Olcina, ha destacado en declaraciones a EFE que estos valores nocturnos son "anómalos", ya que se trata de "cuasinoches tropicales en pleno mes de enero" y ha resaltado los 19,4 de mínima en los termómetros de la población de Pego, al norte de la provincia.

La causa de esta situación es la entrada de una bolsa de aire cálida subtropical con un componente de poniente, lo que provoca que llegue "mucho calor al Mediterráneo" con temperaturas "muy por encima de lo normal, es decir, de 6 a 8 grados".

El experto ha afirmado que la crisis climática está detrás de este comportamiento atmosférico por el que en unos días se ha pasado del frío a un "golpe de calor primaveral", y ha dicho que estos contrastes serán "cada vez más frecuentes".

"La atmósfera se va calentando y, para encontrar el equilibrio, mueve las masa de aire, algunas frías y otras calientes, y provoca contrastes de tiempo en cualquier época del año", lo cual hace que puedan repetirse "la aparición de unas masas de aire más propias del verano en pleno invierno, y viceversa en primavera y verano".