Brexit

Gibraltar: adiós a la UE, hola a la incertidumbre

Tras una ceremonia cargada de tensión y significado, el Peñón ya está fuera de la Unión Europa

La sencillez de la ceremonia que ha marcado la salida de Gibraltar de la Unión Europea apenas puede disimular la trascendencia que para la colonia británica ha tenido este paso. A las doce de la noche se arrió la bandera de las doce estrellas de uno de los tres mástiles que se alzan en el extremo norte de este territorio, a poco metros de la Verja.

Con la Oda de la Alegría de Beethoven -himno de la UE- de fondo Picardo recibió la bandera europea y se procedió al izado de la enseña de la Commonwealth con los emocionantes compases del himno nacional «God save de Queen» de fondo. A pesar de haber votado en más de un 96% a favor de permanecer en la Unión, el resultado del referéndum organizado por Cameron condena a la colonia británica a una etapa de incertidumbres sin precedentes en su historia.

Lionel Chipolina tenía 9 años cuando se cerró la Verja y la escena de la salida de la Unión Europea del Peñón no puede dejar de recordarle aquella fatídica fecha para los gibraltaremos. Tras toda una vida trabajando como intérprete en los tribunales de Gibraltar, ahora forma parte del Unite the nation, el sindicato mayoritario en la colonia británica con 4.200 miembros trabajando en todos los sectores de la economía del Peñón. «Los políticos nos aseguran que está todo controlado y que no va a haber ningún problema. Nos lo hemos currado mucho con el resto de municipios de la mancomunidad y todos estamos muy unidos para que no se toque los lazos económicos y de amistad que que existen.

Pero yo personalmente siento a pesar de todo inquietud de que pueda volver a haber una vuelta a la situación en la que había pueblos separados». Lionel hace referencia al hecho de que con Reino Unido fuera de la Unión Europea, la colonia británica está a merced de decisiones unilaterales del Gobierno de España sobre la intensidad de los controles en la Verja. Antes del divorcio entre Londres y Bruselas la Verja seguía siendo frontera exterior de la Unión porque Reino Unido nunca formó parte de los 26 países del espacio Schengen.

Sin embargo Londres, como Estado miembro, podía presionar a las instituciones comunitarias para que estas aseguraran la fluidez en la Verja tal y como ocurrió en la crisis de los bloques de hormigón en 2014 con Margallo en el Ministerio de Exteriores. En el caso de una hipotética nueva crisis Gibraltar estará completamente a merced de lo que decida Madrid. «En el grupo trasnfronterizo del que formo parte hemos seguido las soluciones que se van a a dar a lo problemas técnicos a partir de ahora y parece que durante el primer año todo va a seguir igual», explica Chipolina. Pero añade: «Sin embargo hay tensión. Yo personalmente voy a echar mucho de menos la bandera. Era una solución satisfactoria al problema de Gibraltar. Ahora nos toca salirnos».

A pesar de que desde todas las instancias se insiste en que no habrá cambios perceptibles en la porosidad de la Verja a partir de hoy las dudas permanecen en la atmósfera gibraltareña. «Puede ser una locura el día 1. Solo si tienen que identificarse serán 2 ó 3 horas de colas. Lo tienen todo cogido con alfileres». Son palabras de José Ignacio Landaluce, alcalde de Algeciras, senador y ex presidente de la comisión de Exteriores del Congreso. «Ahora el acuerdo es que se siga sin identificación. No hay lectores de pasaportes. No hay perdida de dos o tres 4 minutos y torno. Si tuviera que identificarse con pasaporte porque sales y entras de Schengen puede ser el caos. Cinco o seis mil trabajadores fijos más los temporales, mas los que van a comprar tabaco para ganarse cuatro perras... En los 4 memrandums hemos firmado se dice que todo va a seguir igual pero si la UE dice que tienen que cumplir con Schengen todo puede cambiar. Esta todo cogido con alfileres», afirma.