PNV

La UME no actuó en Zaldibar porque “no se produjo ninguna solicitud por parte del País Vasco”

El gobierno responde a una pregunta escrita de la diputada del PP Beatriz Álvarez Fanjul

Imagen de vehículos en las labores de búsqueda de los dos trabajadores sepultados tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar.
Imagen de vehículos en las labores de búsqueda de los dos trabajadores sepultados tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar.H.BilbaoEuropa Press

Una de las críticas de la familia de Joaquín Beltrán en la gestión de la tragedia del vertedero de Zaldibar fue que el gobierno no hubiera solicitado la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias para ayudar en la labores de búsqueda de los dos cuerpos de los operarios tras el derrumbe.

Tras una pregunta escrita formulada por la diputada del Vizcaya del Grupo PP en el Congreso, Beatriz Álvarez Fanjul, en la que solicita conocer ¿qué medios humanos y materiales tanto técnicos como operativos, ofreció aportar la UME tras el derrumbe y qué razones dieron las autoridades vascas para rechazarlos, el gobierno ha contestado que “no se produjo ninguna solicitud por parte de la Comunidad Autónoma el País Vasco”.

Es más, añade que como no hubo petición “no se inició procedimiento alguno de activación de este recurso extraordinario del Sistema Nacional de Protección Civil”. Con esta respuesta se zanja una de la polémicas en torno a la gestión por parte del PNV de la tragedia.

En el escrito se describe cómo es el procedimiento de la intervención de la UME. Señala que “en las situaciones de emergencia que se produzcan con carácter grave,que no sean declaradas de interés nacional, las autoridades autonómicas competentes en materia de protección civil podrán solicitar del Ministerio del Interior la colaboración de la Unidad Militar de Emergencias (UME)”.

Por lo tanto, con esta respuesta se resuelven todos los interrogantes respecto a los motivos por los que no actuó y de quién era la potestad de solicitarlo. Cabe pensar, que al no solicitarlo, el ejecutivo que dirige Íñigo Urkullu minusvaloró el alcance de la tragedia.