Terrorismo

Al Qaeda mira de nuevo a España

Los yihadistas contarán con una base operativa estable para organizar atentados contra occidente. Expertos antiterroristas rediseñan las amenazas a la vista de la situación creada en Afganistán

Efectivos de emergencias y policiales, en la estación de Atocha el 11 de marzo de 2004
Efectivos de emergencias y policiales, en la estación de Atocha el 11 de marzo de 2004Bernardo RodriguezEFE

La nueva situación de Afganistány las facilidades, ya recibidas, de que van a disponer los yihadistas de Al Qaeda (está por ver qué va a ocurrir con los de Daesh) supone un riesgo adicional para España, según expertos antiterroristas consultados por LA RAZÓN.

Por más que el nuevo régimen fundamentalista se esfuerce en presentar una imagen, ajena al salvajismo del pasado, lo cierto es que los hechos le delatan.

La totalidad de los presos talibanes, de Al Qaeda y, al parecer, también los de Daesh, han sido liberados de las cárceles en las que cumplían condena. Inmediatamente, se han incorporado a sus «unidades».

Además, si se lee la letra pequeña de los mensajes que lanzan ahora, lo que piden es el apoyo económico internacional a cambio de mantener esta «moderación». ¿Por cuánto tiempo? Poco, por los primeros informes que llegan desde allí.

Hasta hace pocos meses, y no consta que hayan sido desmantelados, los talibanes, con la presencia encubierta de Al Qaeda, mantenían operativos campamentos de «mártires», individuos destinados a cometer atentados suicidas. Al Qaeda ya sabe (porque alguien se lo ha tenido que transmitir) que van a disponer de todo tipo de facilidades en el «nuevo Afganistán». Por medio de su publicación «Thabat» ha felicitado a los «vencedores» por la reconquista del país, un hecho que hacen suyo conscientes de que vuelven los «buenos tiempos» del pasado, antes de la invasión de Estados Unidos al frente de una Coalición Internacional.

Ha iniciado el camino para recuperar la operatividad que le llevó a cometer los atentados del 11-S en Estados Unidos; y el 11-M en Madrid. Y, según las fuentes consultadas, no va a desaprovechar la ocasión para «vengar» todos estos años de ostracismo y clandestinidad y, por supuesto, las operaciones en las que fueron capturados o muertos sus principales cabecillas, como Kalid Seik Mohamed (KSM), organizador del 11-S, preso en Guantánamo; u Osama Bin Laden, muerto en Paquistán, en una operación de los Navy Seal USA.

A este respecto, a los yihadistas no les ha pasado desapercibida la eficacia de las Fuerzas de Seguridad españolas que, desde el 11-M, han perfeccionado sus métodos de lucha antiterrorista (hasta ser una referencia mundial); y han realizado decenas de operaciones que han llevado a la cárcel a centenares de militantes de Al Qaeda y Daesh. La cooperación internacional de nuestro país ha sido determinante para la culminación de otros operativos.

España ha participado con hasta 27.000 hombres en la operación de Afganistán durante los últimos 20 años y eso la convierte en un objetivo prioritario, según las fuentes consultadas.

Por ello, nada más concluir la ocupación de Afganistán por los talibanes y llegar las primeras noticias de la liberación de los presos, los expertos han procedido a rediseñar el cuadro de amenazas y a incluir a Al Qaeda en un puesto relevante.

Además, la banda que dirige, al menos de momento, Ayman Al Zawahiri, no es ajena a la felicitación general que han recibido los talibanes por su victoria.

Es como si los que ya han impuesto, de hecho, el Emirato Islámico, les sirviera a los terroristas para avalar su gran proyecto de un «Califato Mundial». Sienten, según las citadas fuentes, que el panorama internacional avala sus actuaciones y eso los convierte en mucho más peligrosos.

Los expertos han explicado a este periódico que ahora van a tener que remodelar el citado cuadro de amenazas potenciales que puede sufrir nuestro país e incluir en un puesto destacado a Al Qaeda; y, en función de lo que ocurra en Afganistán con los de Daesh, también a los terroristas de esta banda. De momento, las primeras reacciones son las de mantener el enfrentamiento con los talibanes, aunque hay que esperar a la posición oficial.

Es conocido que las relaciones de Isis con los talibanes distan mucho de ser tan buenas como las de Al Qaeda. En numerosas publicaciones, Daesh ha calificado a los fundamentalistas de Afganistán de «milicia apóstata» y, a través de su franquicia en la zona, el ISKP, ha lanzado en los últimos tiempos ataques contra jefes talibanes, En cualquier caso, los mencionados expertos dan por hecho que Isis va a contar en Afganistán también con «zonas liberadas» para desarrollar sus actividades criminales y proyectarlas hacia occidente.