Pacto

Malestar por la no renovación del CGPJ: «me parece totalmente indecente»

Los magistrados muestran su enfado por la politización del órgano aunque reconocen esperanza por si el pacto termina por extenderse al Poder Judicial en funciones desde hace casi 3 años

El presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes y el presidente del PP, Pablo Casado.
El presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes y el presidente del PP, Pablo Casado.Manuel Ángel LayaEuropa Press

Entre la molestia y la esperanza se dicen los jueces estos días en los que Gobierno y oposición han alcanzado un pacto para renovar todas las instituciones menos la suya. El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sigue caducado desde hace casi 3 años. y ha quedado excluido del acuerdo que PP y PSOE han tardado tanto en conseguir. En diciembre se cumplirían las tres vueltas al sol, pero muchos confían en que antes se produzca la renovación. LA RAZÓN ha hablado con varios magistrados para conocer su sensación y aunque éstas son dispares todos coinciden en una cosa: sea antes o después, se tiene que cambiar el sistema de elección de los vocales.

«Me parece totalmente indecente», expone una magistrada y miembro del actual órgano de gobierno de los jueces. «La Ley está en vigor para todos, y para el CGPJ esto es una situación de agravio comparativo increíble», expone. El miércoles en la sesión de control del Congreso Pablo Casado invitó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a ponerse de acuerdo y menos de 24 horas después, fumata blanca. «Se trata de voluntad política. Tenerla o no tenerla», dice la vocal.

«No tiene mucha explicación...Por una parte no deja de ser un alivio para el propio funcionamiento del sistema y, por otra parte, debe acogerse con estupor y con sensación de desamparo de que, de manera inexplicable se haya quedado excluido el CGPJ», define Juan José José Carbonero, magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Aragón y miembro de la APM, asociación mayoritaria en la judicatura. Los jueces señalan que el hecho de que se haya marcado una línea roja con el Poder Judicial pone todavía más en evidencia la politización del órgano, algo que todos quieren evitar. «¿Qué estigma tiene el Consejo para que se haya quedado excluido de esta renovación?», se pregunta un magistrado del Tribunal Supremo. «Es un mazazo», define.

Dentro de este nuevo acuerdo se nombrarán cuatro nuevos magistrados para el Tribunal Constitucional, nuevos miembros en el Tribunal de Cuentas, un Defensor del Pueblo y presidente de la Agencia de Protección de Datos, pero nada se sabe de las conversaciones sobre los 20 vocales y el presidente que hay que designar para que dirijan la judicatura. Aunque algunos prefieren ver el vaso medio lleno: «me sorprende que se hayan puesto de acuerdo de forma parcial. Pero estoy con la esperanza de que una vez iniciado ese diálogo, la renovación llegue pronto. Muy esperanzada», asegura Ascención Martín, magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Murcia y portavoz de la Asociación progresista Juezas y Jueces para la Democracia.

Sin embargo, la mayoría de las fuentes consultadas recalcan la importancia de que el acuerdo no llegue solo, sino que el Ejecutivo se comprometa a cambiar la ley para que sean los jueces los que elijan a sus pares y no vuelva a producirse esta imagen de que los tentáculos políticos mueven los tribunales. «El problema es que no basta con designar nuevas personas para repetir los mismos errores, hay que asumir que hay que reformar el sistema de elección de los vocales y no solo renovar el órgano», indica Jorge Fernández Vaquero, magistrado de Violencia sobre la Mujer en Jerez y portavoz de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria, la segunda mayoritaria en la carrera. Incluso, hay quien prioriza este cambio normativo: «yo desde luego creo que prefiero que esté bloqueado y se apruebe la reforma a que volvamos a pactar y se produzca un nuevo acuerdo político de los jueces porque luego son 5 años», señala Concepción Rodríguez, magistrada de un Juzgado de Menores en Madrid y portavoz del Foro Judicial Independiente.

Si finalmente Casado y Sánchez lograran acordar los nombres para un nuevo CGPJ estos se mantendrían el cargo el próximo lustro. El PP pone ahora como condición ‘sine qua non’ el cambio en la elección de los vocales, si bien los magistrados le reprochan también que cuando pudo haber cambiado la ley no lo hizo. «Esa reforma la va a tener que hacer España sí o sí, salvo que queramos acabar como Polonia. Nosotros creemos que hay que cumplir lo que dice Europa y el GRECO», subraya Rodríguez.