Los socialistas con la CUP

La toxicidad política que el separatismo provoca en España está alcanzando cotas muy preocupantes con Sánchez, que ha situado de timoneles del Estado nada menos que a ERC y Bidu; es decir, a formaciones políticas que propugnan la literal destrucción de la nación española. Solo una sociedad y un pueblo sin pulso pueden explicar –que no justificar– una situación así, que resultaría inconcebible en cualquier otro país no solo de la UE, sino del mundo. En esta atonía social subyace la degradación ética y moral de la política con estas situaciones y otras que se van conociendo (…).

En Cataluña esa situación se proyecta con especial intensidad desde que el Procés contaminó el ambiente. Un ejemplo muy actual y penoso lo tenemos en Badalona, la tercera ciudad catalana, donde este lunes se anuncia una moción de censura contra el popular alcalde Xavi García Albiol. Las circunstancias próximas y remotas que rodean el hecho son elocuentes. Desde 2011 que asumió la alcaldía, ha ganado las tres elecciones, siendo desplazado en 2015 pese a haber doblado en concejales a la segunda fuerza, por un pacto entre nada menos que la CUP y el PSC, que desde entonces se han alternado al frente del ayuntamiento.

Si en 2015 los socialistas le regalaron la alcaldía a la CUP para que no gobernara Albiol, en 2019 se permutaron los papeles, hasta que el pasado año 2020, el alcalde socialista fue detenido conduciendo borracho y tras agredir a un mosso saltándose el confinamiento. Albiol fue elegido alcalde como lista más votada al no ponerse de acuerdo el PSC y la CUP en el último momento sobre cómo repartirse de nuevo la alcaldía los tres años restantes.

Ahora vuelven a las andadas con una moción de censura contra Albiol pactada por ocho partidos políticos –entre ellos, todos los separatistas y Podemos– con la CUP mandando desde fuera del gobierno municipal como árbitro supremo. El todavía alcalde se ha ganado el respeto y aprecio de los ciudadanos por su gestión, revalidada crecientemente en las tres últimas elecciones y en los sondeos, tanto a pie de calle como en las encuestas. Las últimas le dan un 47% de apoyo, y mayoría absoluta en el Consistorio.

Justifican la moción por la aparición en los llamados papeles de Pandora de un apoderamiento mercantil a su nombre de hace 16 años –no siendo alcalde–, en una sociedad mercantil que nunca tuvo ningún ingreso económico en su vida. Ese poder legal jamás se utilizó, ya que la mercantil fue totalmente inactiva. Así estamos con estos socialistas al mando. En Badalona y en España.