Audiencia Nacional

La Fiscalía se opone a que el juez requiera al CNI informes sobre Ghali y Marruecos

El Ministerio Público considera «impertinente» esta prueba que para la defensa acreditaría el «origen espurio» de la investigación

El líder del Frente Polisario Brahim Ghali en febrero de 2022
El líder del Frente Polisario Brahim Ghali en febrero de 2022Fateh GuidoumAgencia AP

La Fiscalía de la Audiencia Nacional se ha opuesto a pedir al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que remita copia de los informes reservados sobre Marruecos y Brahim Ghali. La petición partió del líder del Frente Polisario el pasado 8 de junio después de que se hiciera público el contenido de estos documentos que, en principio, acreditarían el «origen espurio» de la causa. Fuentes fiscales confirman que el Juzgado de Instrucción número 5 a cargo ya tiene contestación: se trata de «pruebas impertinentes».

El magistrado instructor Santiago Pedraz tendrá ahora que decidir si se posiciona con el Ministerio Público o da un giro de 180 grados pidiendo a los espías estos informes que sitúan al querellante, Fadel Breica, como parte del servicio secreto marroquí. Las fuentes consultadas explican que es poco probable que papeles que forman parte de la médula del Estado terminen incorporándose a investigaciones judiciales visibles para las partes personadas, aunque hay excepciones como sucede en la causa sobre Pegasus. En otro despacho de la Audiencia Nacional el juez José Luis Calama indaga en cómo el software se introdujo en el móvil de cuatro miembros del Gobierno y ha tomado declaración incluso a la exdirectora del CNI, pero las fuentes de ese proceso han advertido de que a pesar del levantamiento del secreto de sumario todo lo que refiera a confidencias del Estado -y lo que tiene que ver con el CNI lo es- seguirá bajo el velo protector.

El pasado 8 de junio el abogado de Ghali, Manuel Ollé, solicitó al juez dos informes del CNI con fechas del 18 de mayo y 24 de junio de 2021 cuando se produjo la mayor crisis migratoria en Ceuta con más de 10.000 personas cruzando la frontera de Marruecos. Según estos documentos de los espías, que fueron desvelados por El País, Marruecos desplegó una doble estrategia «judicial y mediática» con el fin de «acosar» a Ghali y «dificultar su movilidad» cuando supo que el líder saharaui había sido acogido en Logroño. El letrado quiere que estas líneas se incorporen a la causa que, precisamente, fue reactivada cuando se conoció que Ghali estaba en España y podía declarar. «Dicho informe incluiría un anexo con la identidad de personas y organizaciones supuestamente colaboradores en España de la Dirección General de Estudios y Documentación (DGED), servicio de inteligencia exterior dependiente de las Fuerzas Armadas marroquíes, entre los que se señalaría a don Fadel Breica», expone Ollé.

Breica declaró ante el juez Pedraz en junio de 2021 y reiteró que fue torturado por el Frente Polisario durante su estancia en los campamentos de refugiados de Tinduf (Argelia). Su querella es de 2019 y acusaba a Ghali de delitos de detención ilegal, torturas y lesa humanidad. El magistrado está a la espera de que declare un testigo que no se encuentra en España para decidir si archiva el caso -como ya hizo con otro procedimiento similar contra Ghali- o lo envía a juicio.

En estos informes de la Inteligencia española se apunta que Breica «probablemente» realizó ese viaje a Tinduf «siguiendo instrucciones de Marruecos para provocar a la cúpula polisaria y forzar su detención». Analiza que los «únicos ingresos» del querellante proceden del DGED aunque él niega cualquier relación.