Encuesta

El 54% de los votantes del PSOE teme otro desafío al Estado tras la amnistía

Tres de cada cuatro españoles rechazan el referéndum y más de la mitad cree que la convivencia en Cataluña no ha mejorado

Encuesta CATALUÑA 2023
Encuesta CATALUÑA 2023Antonio CruzLa Razón

No solo el bloque político de la derecha o la vieja guardia socialista clama contra el coste para España que supondría los pactos del PSOE con los partidos independentistas si se firma la amnistía con el fin de sacar adelante la investidura de Pedro Sánchez. Existe un clamor social que poco a poco va manifestándose en contra tan pronto como suceden los hechos, a pesar de que Pedro Sánchez evite hablar explícitamente de la negociación de una amnistía o de que en los últimos días dirigentes del partido pidan a los partidos catalanes “altura de miras” para esquivar la ingobernabilidad que derivaría en unas nuevas elecciones generales.

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez se presentará este martes ante el Rey para confirmar sus apoyos y para solicitarle que le nombre candidato. De momento no hay un acuerdo firmado con ERC y Junts, partidos sin los que el PSOE no puede superar la investidura, aunque en Ferraz y en Moncloa confían en arrancar su “sí” y minimizan el “ruido” del órdago independentista que supeditan un acuerdo a la concesión de una amnistía a cientos de personas y líderes soberanistas y a un referéndum de autodeterminación. Sin embargo, pese a que los socialistas imponen silencio en las negociaciones y no confirman los términos de la hipotética amnistía, su electorado ya se revuelve. Más de la mitad de los votantes de Pedro Sánchez(el 53,7) teme un nuevo órdago independentista si se concede a Junts y ERC su exigencia de aprobar una ley de amnistía para borrar los delitos por los que fueron juzgados los líderes del 1-O en Cataluña.

Así lo refleja la encuesta de NC Report para LA RAZÓN, la cual deja ver un emergente malestar con la actual dirección del PSOE si continúa en la senda de negociar con el expresident catalán fugado Carles Puigdemont y con Oriol Junqueras una amnistía. Según el barómetro realizado entre los días 26 y 30 de septiembre a 1.000 personas, el 70,4 por ciento confiesa su miedo a que se vuelva a producir un órdago independentista como el sucedido en 2017 con la declaración de unilateralidad en Cataluña después de legalizar la amnistía. Incluso los votantes de Sumar, partido que más se ha involucrado y ha tratado de allanar la negociación con los independentistas para la investidura, advierten del peligro, según el 72,7%. Precisamente Yolanda Díaz acudió a principios de mes a Waterloo para entrevistarse con Carles Puigdemont, sin el aval de Pedro Sánchez, así, sus votantes alertan del riesgo de un nuevo acontecimiento independentista si se cede a la amnistía. En todas las horquillas de edad supera el 60% la afirmación de que así pasaría.

Los independentistas han avisado esta misma semana que la amnistía -donde el PSOE fija su línea roja- es solo el principio de las reivindicaciones que aspiran a conseguir durante la legislatura. Así, no dejan de lado la celebración de un referéndum de autodeterminación que no sea juzgado en los tribunales. Ante esto, el 72,6 por ciento de los ciudadanos rechazaría apoyarlo frente a un 21,9 por ciento que sí lo aceptaría. Los electores de PP y Vox son quienes con más determinación lo rechazan, en un 92,5% y un 100% respectivamente. Es el partido de la vicepresidenta segunda en funciones quien sí estaría de acuerdo con ello, según el 72,7. Los correligionarios de Pedro Sánchez lo rechazan mayoritariamente, aunque un 34,1 estaría a favor.

En un momento en el que se pone en duda los pasos seguidos en 2017 para frenar el desafío independentista, hasta un 74,6 por ciento reconoce que el Estado “salió reforzado” con la respuesta que dio entonces el Gobierno del PP al 1-0, es decir la aplicación del artículo 155 de la Constitución para intervenir Cataluña, que contó con la cooperación del PSOE. Por electorados, el 73,2% de los socialistas así lo confiesan, al igual que el 94,3 y el 100 por cien del PP y Vox. Mientras, los menos crédulos con esta afirmación son los votantes de Yolanda Díaz. El 63,6% de sus afines no aprecian un Estado más reforzado en la actualidad.

En medio de las negociaciones del PSOE con su izquierda, los líderes socialistas, con Pedro Sánchez a la cabeza se afanan en asegurar que la convivencia en Cataluña es mejor ahora que en 2017. De hecho, el propio presidente del Gobierno prometió este mismo fin de semana “cuatro años más de convivencia y de concordia” si es investido por el Congreso de los Diputados. Una afirmación que casi el 60 por ciento de los encuestados desmiente. Solo un 32,6% cree que la convivencia en Cataluña es ahora mejor que en 2017, año en el que se produjo el desafío independentista bajo el gobierno del presidente popular Mariano Rajoy. Los apoyos de Sánchez y de Díaz son quienes más lo respaldan, en un 51,2% y un 63,6% de los casos, mientras que en el PP y Vox el 81,1 y el 100% lo rechaza.

De la misma manera, el fulgor independentista no se ha apagado según reconoce casi el 60% de los encuestados, mientras casi el 30 por ciento cree que el sentimiento separatista ha perdido "toda su fuerza”. Los más cercanos a Pedro Sánchez son quienes así lo pregonan con más fuerza en un 41,5% de los casos, aunque la opinión no es unánime entre los socialistas porque un 43,9 por ciento no lo cree. Por último, el 68,5% de los votantes de Santiago Abascal advierte de que el independentismo continúa teniendo fuerza.