El beneficio que la ley del "solo sí es sí" ha traído a 5 violadores despiadados

Desde que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) hizo público la semana pasada el primer dato oficial de rebajas de condena por la aplicación de la ley del "solo sí es sí" (721), el número ha quedado atrasado porque a final de semana el Tribunal Supremo sumaba otro descenso de años de cárcel a un violador y otros tribunales como los gallegos hacían públicas nuevas reducciones. En total hay 74 violadores que han sido excarcelados y detrás de cada uno de ellos una historia de terror para sus víctimas que se refleja en las sentencias. Los efectos no deseados de la ley propulsada por el Ministerio de Igualdad alcanzan restas de años de prisión pequeñas, pero también reducciones a brutales agresores sexuales.

Los violadores de portales

En enero la Audiencia de Valladolid acordó rebajar de 22 años a 20 la prisión para un agresor sexual múltiple al que bautizaron el 'violador del portal'. Llegó a abordar a tres mujeres en plena calle y, simulando que portaba un arma, las introducía en la entrada de algún portal. En todos los casos utilizó violencia, arrastró a las mujeres por el pelo, les tapó la boca y la nariz y les propinó golpes en la cara. Dos de ellas gritaron tanto que algún viandante les escuchó y el agresor huyó antes de que la violación se consumara. Una tercera no tuvo esa suerte.

Y no es el único 'violador del portal'. También en Lugo un agresor conocido con el mismo nombre atemorizó a las jóvenes de la provincia durante meses. Era un instalador de fibra óptica que conocía a la perfección los recovecos de muchos portales. Así que utilizó estos conocimientos para meter a una víctima en el ascensor, pulsar la numeración secreta del ascensor y llevarla al cuarto de contadores para violarla. Lo intentó con más mujeres. Solo fue condenado a seis años de prisión porque llegó a un acuerdo con las acusaciones, pero con la ley del "solo sí es sí" su pena se ha quedado en cuatro y ha sido excarcelado.

Pedófilos bebés

El Tribunal de Castilla y León acordó rebajar de cinco años y medio a cuatro años y seis meses de cárcel la pena a un pedófilo que había sido condenado por poseer y distribuir vídeos de violaciones anales. Cuando la Policía entró en su vivienda en 2016 encontraron más de 33.000 archivos de pornografía infantil, algunos de extrema crudeza con violaciones a pequeños de entre dos y tres años.

Y todavía más tremebundo es el caso de un señor de 56 años que vivía con su pareja y el hijo de esta en A Coruña. La niña de cuatro años llamaba al agresor "Papá". Una mañana del 9 de abril cuando la madre abandonó el domicilio, dejando a su hija con el pañal puesto y dormida. Ese día, él le retiró el pañol y comenzó a hacerle tocamientos en la zona vaginal, llegando a introducirle los dedos. Sobre las 14:00 cuando llegó la madre, su hija en vez del pañal tenía una toalla con gasas y Betadine, dejando en evidencia el sangrado vaginal.

El asesino del niño de Lardero

La Audiencia Provincial de La Rioja fue una de las que en un principio se negó a las rebajas. Finalmente terminó revisando todas sus 55 sentencias por estos delitos y cedió en dos casos por considerar la nueva ley más favorable para el reo. Uno de ellos, especialmente sangrante porque fue a Francisco Javier Almeida que está en prisión provisional por, presuntamente, haber asesinado al niño Álex en Lardero (La Rioja) en 2021. La rebaja se produjo sobre su condena anterior que era de 10 años por un delito de agresión sexual. Ahora se ha quedado en ocho.

El profesor y sus alumnos

Uno de los casos más sonados al principio de las rebajas fue el de un profesor de inglés del colegio de San Sebastián de los Reyes (Madrid) que había sido condenado a casi siete años de cárcel por pagar a los menores para que fueran a su casa y practicaran sexo delante de él o les dejara tocarlos. Su sentencia se cayó de un plumazo porque la Audiencia Provincial madrileña entendió que ese delito de "engaño" para mayores de 16 años había quedado despenalizado porque de la redacción del nuevo Código Penal entienden que si los jóvenes tienen la madurez suficiente y no han sido forzados, su voluntad no ha quedado anulada.

La excarcelación del documente fue la primera en hacerse pública porque su pena quedó en un año y tres meses solo por tenencia de pornografía infantil. "Ha sido destipificado con la reforma efectuada". Aunque no en este caso porque no ha sido recurrido, esta interpretación tendrá que pulirla el Tribunal Supremo.

Violación grupal

Las historias de víctimas de violencia sexual que han visto a sus agresores favorecidos por el nuevo Código Penal, también contemplan chicas a las que agredieron grupalmente. Es el caso de una estudiante de Matemáticas que en una fiesta en un pub de Galicia por el paso de ecuador algunos alumnos le metieron droga en la copa. Ella se convirtió en un ser "dócil y privado de capacidad de análisis y defensa", dice la sentencia, y por eso tiene amnesia total de lo que ocurrió des de las dos de la mañana que abandonó el local hasta que a las siete menos veinte se vio tirada cerca de la facultad, sin ropa interior y con su vestido ensangrentado. Los jueces reconstruyeron la escena: ella salió voluntariamente con varios hombres que la llevaron a un callejón cercano a la universidad. En un momento sintió miedo. Evitó ser penetrada cerrando las piernas. La penetraron por todos lados varias veces y simultáneamente, lo que le produjo un desgarro vaginal. Luego le robaron y la abandonaron. Solo fue juzgado uno de ellos porque los demás no pudieron ser identificados. El "solo sí es sí" ha dejado la condena de 13 años en 12 y 4 meses.