Casa Real

La Princesa Leonor entra en combate: así será el "hundir la flota" con torpedos, misiles y guerra electrónica

La Guardiamarina Borbón estará durante un mes en la fragata Blas de Lezo

La princesa Leonor se prepara para participar en uno de los ejercicios más imponentes y espectaculares de la Armada Española: el SINKEX (Sinking Exercise), una maniobra de fuego real que reproduce, en términos militares, el clásico juego de "Hundir la flota". LA RAZÓN adelantó ya que participaría en este ejercicio tras incorporarse a la fragata de guerra Blas de Lezo (F-103) donde vivirá en primera persona una operación naval con misiles, bombas, sistemas de guerra electrónica y, por primera vez, el lanzamiento de un torpedo real por parte del submarino S-81 Isaac Peral.

El escenario será el océano Atlántico, donde una decena de buques de guerra convertirán las aguas en un auténtico campo de batalla. Entre otros participarán el portaaeronaves Juan Carlos I, los buques de asalto Castilla, la fragata Blas de Lezo, La Álvaro de Bazán, el Cantabria, varias unidades clase Santa María... Así hasta diez.

La fragata 'Blas de Lezo' zarpa desde Ferrol para integrarse en la agrupación permanente número 2 de la OTAN en el Mar Negro
La fragata 'Blas de Lezo' zarpa desde Ferrol para integrarse en la agrupación permanente número 2 de la OTAN en el Mar NegroJosé DíazEuropa Press

Un objetivo real a hundir

La clave del SINKEX es la destrucción controlada de un barco real, ya retirado del servicio, que sirve como blanco. No se trata de un ejercicio simulado, sino de fuego real y objetivo real. El buque, compartimentado para resistir el impacto, se convierte en un laboratorio flotante para estudiar en tiempo real los efectos de cañones, misiles, bombas aéreas y ahora también torpedos.

Cada impacto proporciona datos clave: cómo responde un casco bajo fuego directo, qué sucede cuando una sala de máquinas es alcanzada, cómo se comporta la estructura antes de irse al fondo. El ejercicio es único, y sólo se realiza cada dos o tres años, ya que depende de la disponibilidad de buques desactivados.

Leonor, en plena acción militar

La Guardiamarina Borbón Ortiz, ya en formación, asistirá a este despliegue sin precedentes, un paso más en su progresiva inmersión en el mundo castrense. Ya participó en maniobras de instrucción en tierra y a bordo del Juan Sebastián de Elcano, pero el SINKEX representa una experiencia directa en un entorno operativo de alta intensidad.

Su embarque en la Blas de Lezo, uno de los buques más avanzados del mundo, le permite familiarizarse con sistemas de combate reales, incluyendo radares Aegis, misiles SM-2, sistemas CIWS y la guerra electrónica en toda su dimensión.

Visita al submarino Isaac Peral S-81 y a la escuela de submarinistas, en su sede de Cartagena. © Jesús G. Fer
Visita al submarino Isaac Peral S-81 y a la escuela de submarinistas, en su sede de Cartagena. © Jesús G. FerJesús G. FeriaFotógrafos

Un ejercicio con proyección internacional

El SINKEX no sólo tiene valor táctico. También refuerza la proyección de la Armada Española dentro del marco OTAN y en cooperación con aliados. El uso combinado de diferentes plataformas -desde portaaeronaves a submarinos de última generación- permite ensayar maniobras de ataque coordinado, logística naval y despliegue de medios en situaciones reales.

El torpedo del S-81 Isaac Peral, que será empleado por primera vez en este ejercicio, representa además un hito técnico. Se trata del primer submarino de diseño y fabricación española en uso operativo, y esta maniobra será también una prueba de fuego para su capacidad ofensiva. El torpedo será el último en actuar pues a buen seguro, cuando eso ocurra, el objetivo ya estará "tocado y hundido".