Patrimonio

Las esculturas del Valle de los Caídos no se eliminarán ni se dividirá la explanada

El Ministerio de Vivienda y la Iglesia aclaran que la intervención en los espacios religiosos será mínima

MADRID, 11/11/2025.- Proyecto 'La base y la cruz' que ha sido elegido este martes por un jurado como ganador del concurso internacional convocado por el Gobierno para resignificar el Valle de Cuelgamuros, antiguo Valle de los Caídos, en aplicación de la Ley de Memoria Democrática. EFE/ Rodrigo Jimenez
Anuncio del proyecto ganador del Concurso Internacional de ideas para la resignificación del Valle de CuelgamurosRodrigo JimenezAgencia EFE

El proyecto ganador para reformar el Valle de los Caídos de acuerdo a los postulados de la Ley de Memoria Democrática no afectará a ninguno de los elementos religiosos del enclave. La intervención será mínima y se reducirá prácticamente a unos carteles explicativos en la basílica y su entorno. Así pues, se respetarán las esculturas de la Piedad, de las virtudes teologales y de los cuatro evangelistas que están a los pies de la cruz de 150 metros que corona el enclave de Cuelgamuros.

Así lo confirmaron ayer a LA RAZÓN tanto desde el Ministerio de Vivienda como desde el Arzobispo de Madrid. Lo cierto que, después de que se dieran a conocer las líneas generales de ‘La base y la cruz’, la propuesta vencedora del concurso internacional de ideas en el que participaron 34 estudios de arquitectura, hay quien dio por hecho que se borraría del mapa el grupo escultórico que acompaña a la majestuosa cruz del enclave. ¿El motivo? En la maqueta que se presentó en la puesta de largo del proyecto no aparecían como tal. Sin embargo, fuentes del equipo de la ministra Isabel Rodríguez aclaran que se trataba solo de una maqueta de contorno, en la que se ofrecen las líneas generales de trabajo, pero en la que no se aterriza en el detalle de esta iconografía religiosa, de la misma manera que no se incluyen otros elementos del entorno. Desde Vivienda se muestran especialmente molestos por el hecho de que se dedujera, sin preguntar, que se estaba acometiendo una desacralización encubierta del recinto.

Si así fuera, se estarían quebrantando las líneas básicas del acuerdo al que la Iglesia y Moncloa llegaron el pasado marzo, que incluía además un acceso independiente a la basílica y la presencia de la comunidad benedictina en el lugar. En caso de que se quisiera borrar del mapa a la Piedad, por ejemplo, ya habría manifestado su rechazo el Arzobispado de Madrid. Sin embargo, tal y como ha trascendido, el proyecto ganador se aprobó por unanimidad, lo que implica el respaldo implícito del sacerdote Daniel Escobar Portillo, presente como asesor litúrgico y que es el delegado de liturgia de la Archidiócesis de Madrid.

De hecho, tal y como ya desveló ayer este diario, ‘La base y la cruz’ sería la propuesta menos invasiva de las diez finalistas que se presentaban en esta última fase del concurso para el Valle.

Por otro lado, desde el Ministerio también aclaran que la reforma de Cuelgamuros no pasa por dividir en dos la explanada como si se tratara de una frontera a través de una «grieta» lineal, como también se podría haber deducido al echar un primer vistazo a la maqueta. La realidad es que las dimensiones del boceto en tres dimensiones hacen que se presentara ayer en dos bloques. La verdadera «gran grieta» que se quiere representar es el óvalo que se abrirá en el centro de la explanada y que permitirá crear una planta inferior donde irá ubicado el nuevo centro de interpretación.