Fin de la comisión-tongo

La presidenta navarra, Yolanda Barcina, ha afirmado hoy que no va a dimitir, no va a convocar elecciones y que mantiene su confianza en la consejera de Economía, Lourdes Goicoechea.

La comisión de investigación contra la vicepresidenta y consejera de Hacienda en Navarra, Lourdes Goicoechea, dio carpetazo antes de tiempo. La presidenta del Navarra, Yolanda Barcina, ya había advertido de que todo sería un «paripé» político y que el veredicto ya estaba tomado. Ha sido la comisión más breve de todas las que se han realizado en un Parlamento – sólo ha durado tres días– porque los partidos decidieron que ya no era necesario escuchar a más ponentes. PSN, Bildu, Gero Bai, IE... tenían desde antes de su inicio ya pensadas sus propias conclusiones y no lo ocultaban ni en la puesta en escena. La comisión cerró y no se demostró que existiera corrupción –objetivo prioritario con el que trataba el PSN de justificar su abrazo a Bildu para una posible moción de censura–. El propio portavoz de Aralar, Patxi Zabaleta destacó que no se había demostrado que hubiera corrupción pero las conclusiones ya estaban pactadas previamente. Es por eso que ayer, al aprobarlas pidieron a Goicoechea y Barcina que «asuman las correspondientes responsabilidades políticas», dimitan y se convoquen elecciones para el próximo 25 de mayo. En caso contrario, «las presentes conclusiones obligan a los grupos a tomar las medidas pertinentes para devolver la palabra a la ciudadanía y poner fin a la situación actual». La comisión aprobó el dictamen con las conclusiones con los únicos votos en contra de UPN y PPN. El resto de grupos, PSN, Bildu, Aralar-NaBai, Izquierda-Ezkerra y Geroa Bai votaron a favor. El dictamen será remitido a la Mesa del Parlamento para que sea ratificado en pleno. Igualmente, se remitirán todas las actuaciones al Ministerio Fiscal. Tras concluir la comisión, su presidente, el socialista Juan José Lizarbe, expuso ante los medios de comunicación que se obtuvieron ocho conclusiones basadas en once hechos «acreditados». Lizarbe dijo que las conclusiones son «contundentes» y que ahora «cada grupo tiene que evaluar las iniciativas políticas que se puedan plantear». Nada fuera de lo ya anunciado por PSN y Bildu y del pacto que ambos cerraron con Txelui Moreno de interlocutor. En concreto, se concluyó que Goicoechea, «prevaliéndose de su cargo, realizó injerencias e interferencias en el normal y autónomo funcionamiento de la Hacienda Tributaria, con la intención de obtener ilegalmente datos fiscales protegidos, con la intención de mediar en el funcionamiento autónomo de la Hacienda, con la intención de obtener trato de favor para una empresa anterior cliente de su asesoría fiscal, con la intención de obtener trato de favor para las empresas anteriores clientes solicitando el plan de inspección», dice el texto sin pruebas. Por su parte, la presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, salió ayer en rueda de prensa y ante las conclusiones subrayó lo que ya dijo antes de la comisión: que no piensa dimitir porque ella no va a «seguir la hoja de ruta de Bildu» e indicó que quien siga esa hoja de ruta tendrá que «explicarlo». Barcina mantiene su confianza en Goicoechea porque «no se ha demostrado nada contra ella» y dijo que la comisión lo que ha permitido observar es que «tanto el Gobierno de Navarra, como la Hacienda foral, como la consejera han actuado con honestidad».

El pacto de la vergüenza

El PSN, entre Ferraz y Bildu

Los socialistas navarros se reunen hoy con su ejecutiva regional para analizar si siguen adelante con el pacto que mantienen con Bildu o escuchan a Ferraz. Será la semana que viene cuando la Ejecutiva nacional tiene previsto reunirse. Está por ver si Roberto Jiménez entrega Navarra a los abertzales.