País Vasco

El Gobierno vasco pide reconocer a todas las víctimas, no solo a las de ETA

Pradales equipara "el terror" de los etarras y "la violencia criminal del GAL" con "el abuso policial"

VITORIA, 10/11/2024.- El Gobierno Vasco conmemora el Día de la Memoria en un acto institucional que preside el lehendakari, Imanol Pradales, junto a la consejera María Jesús Carmen San José López y Alberto Alonso Martín, Director del Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, este domingo en Vitoria. EFE / L. Rico
El Gobierno y el Parlamento vascos celebran el Día de la Memoria en recuerdo a las víctimaslricoAgencia EFE

El lendakari, Imanol Pradales, ha defendido la necesidad de una memoria "completa, sin discriminaciones ni olvidos", que evite el "revanchismo" y contribuya a superar los relatos "autojustificativos y autocomplacientes" en torno al terrorismo y otras formas de violencia, como los abusos policiales.

Pradales ha participado este domingo, en Vitoria-Gasteiz, en el acto organizado por Gogora-Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, con motivo del 'Día de la Memoria', en el que se ha reivindicado de forma especial a las personas que desafiaron al "miedo" y rompieron "la espiral de silencio" en torno al terrorismo con gestos de apoyo y cercanía a las víctimas de ETA.

Pradales, que en su discurso ha hecho referencia a casos de abusos policiales, violencia callejera, así como a los atentados mortales y secuestros cometidos por la ya desaparecida ETA a lo largo de los años, ha llamado a "construir la memoria sobre principios y valores éticos y democráticos".

"Debemos construir sobre la verdad", ha manifestado, para apelar a "una memoria sincera, clara y justa", que se sitúe "a la altura del padecimiento tras tantos años de terror, injusticia y dolor".

El lehendakari ha subrayado que se ha de construir una memoria "completa, sin discriminaciones ni olvidos"; que no sea "revanchista" y que sea "crítica y "autocrítica", con el fin de "superar los relatos autojustificativos y autocomplacientes". "Ese debe ser nuestro compromiso humano y ético", ha advertido.

En su intervención, ha afirmado que el futuro de los jóvenes que han nacido o crecido tras la disolución de ETA "depende también de que no repitan los mismos errores del pasado". "En este 'Día de la Memoria' miramos al ayer para construir un mejor mañana, este es el sentido para las generaciones jóvenes: conocer para que nunca se vuelva repetir", ha añadido.

De esa forma, ha reiterado la necesidad de una memoria para "reafirmar el derecho a la vida, la dignidad de la persona y los Derechos Humanos", unos principios y actitudes que --según ha destacado-- son esenciales para "reforzar la democracia".

Imanol Pradales ha recordado, además, la reacción contra la "violencia e injusticia" protagonizada por la "gran mayoría de la sociedad vasca". El lehendakari ha subrayado que aquella fue "una reacción espontánea, sincera", y que aunque "se manifestó de diferentes maneras, tanto en espacios públicos como privados, siempre estuvo ahí". Por ese motivo, ha mostrado su reconocimiento a las personas que participaron de aquella respuesta.

Por su parte, la consejera de Justicia y Derechos Humanos, María Jesús San José, que también ha intervenido en el acto, ha advertido de que una sociedad sin memoria es una sociedad "enferma, inhumana, perdida e incapaz de construir un mínimo suelo ético que permita la convivencia".

De esa forma, ha subrayado que la sociedad vasca y sus instituciones trabajan para "convertir la memoria de las víctimas del terrorismo y la violencia policial ilícita en el referente de un futuro en paz, basado en la libertad, la tolerancia, la justicia y el respeto al pluralismo".

El objetivo, tal como ha añadido, es configurar una memoria que permita construir "un relato compartido, sustentado sobre el pilar irrenunciable del respeto a los Derechos Humanos y a los valores democráticos por los que tanto ha luchado la sociedad vasca".

San José ha precisado que este relato deberá "desterrar cualquier intento de negación, excusa o justificación de lo que no fue más que violencia, dolor, sufrimiento y fractura social". Por ese motivo, ha defendido la importancia de una memoria "basada en el rigor histórico y alejada de las imprecisiones, las medias verdades o las invenciones intencionadas".

La memoria --ha añadido-- también se ha de sustentar en la comprensión de que la "complejidad" del pasado de Euskadi, "sin recurrir a la tentación de ocultar, esconder o silenciar aquello que más nos duele recordar". "Una sociedad adulta, y la vasca lo es, tiene que saber gestionar también su pasado, por muy sucios que puedan ser algunos de sus pasajes", ha destacado.

Además, ha puesto de manifiesto que la memoria debe recordar "a todas las víctimas, sin excepción". "A las del terror de ETA, a las provocadas por la violencia criminal del GAL, del Batallón Vasco- Español y de otros grupos violentos, como aquellas que lo fueron del abuso policial", ha detallado.

La consejera ha recordado que todas ellas "son víctimas de aquellos que pretendían imponer a la sociedad vasca sus proyectos políticos totalitarios a través del miedo, la extorsión y la violencia".

A su vez, ha indicado que se ha de trabajar por una memoria que "recupere los esfuerzos de aquellas y aquellos que defendieron valores democráticos, de no violencia y de convivencia en momentos difíciles, porque son eslabones importantes de la memoria democrática de Euskadi".

En este sentido, ha afirmado que con este 'Día de la Memoria' se pretende reivindicar el papel de "personas que, a veces de forma anónima y a veces de forma más visible, decidieron renunciar a caminar al ritmo que nos pretendía imponer el miedo y romper la espiral del silencio".

Tal como ha indicado, estas personas se significaron en ocasiones "con gestos visibles de trascendencia pública por los que pagaron un alto precio". No obstante, según ha explicado, otras veces protagonizaron "gestos más pequeños, aunque igualmente importantes". San José ha afirmado que, en todo caso, fueron personas "que decidieron mirar a la cara a las víctimas, mostrarles su cercanía", una actitud que "en aquel momento suponía un bálsamo para un dolor tantas veces incomprendido e ignorado".

Por ese motivo, ha reivindicado la aportación de estos ciudadanos a la construcción de una sociedad "basada en la libertad, la dignidad y la tolerancia".