Toni Bolaño

No importa la verdad

"La pelea política ha degenerado en orgía pagana con el difama que algo queda"

Antena 3 Noticias ha hecho la primera entrevista en una televisión nacional al supuesto cabecilla de la trama del caso 'Mediador', el conocido como el 'Tito Berni'.
Antena 3 Noticias ha hecho la primera entrevista en una televisión nacional al supuesto cabecilla de la trama del caso 'Mediador', el conocido como el 'Tito Berni'.Atresmedia

Pensábamos que la corrupción era cosa del pasado y no. Sigue estando al cabo de la calle. El caso Berni, además, está aderezado de asuntos chabacanos y obscenos, más allá de los turbios intrínsecos a cualquier trama. La cercanía de las elecciones ha hecho el resto, y ahora el caso Tito Berni, bautizado así por la presidenta madrileña de la mano de Miguel Ángel Rodríguez, ocupa portadas y portadas muchas veces con informaciones que no pasarán a la historia dando protagonismo al señor que ha puesto el ventilador de mierda a funcionar, o sea, el mediador.

En el PSOE hay preocupación, pero hay que reconocer que Santos Cerdán actuó con rapidez y el diputado Juan Bernardo se quedó en el exdiputado Berni en cuestión de horas, y algunos de sus colaboradores, ahora imputados, fueron cesados antes de que conociéramos los hechos. Primera pregunta importante. ¿Por qué fueron cesados? ¿Conocía el Gobierno canario la investigación? Cada día que pasa conocemos más nombres de colaboradores necesarios en las andanzas de diputado Berni. Todos circunscritos a Canarias y está por ver si las decisiones tomadas por estos colaboradores lo eran por ser miembros de la trama o porque lo que se les pedía lo podían hacer con sus atribuciones. Consejo: siempre es mejor dejar las condenas para luego y respetar la presunción de inocencia.

Sin embargo, la juerga de la pelea política se centra en el Congreso de los Diputados. “El núcleo duro de Berni” titulaba un periódico sobre los diputados que le acompañaron a una cena. Que luego se fueran de putas o estuvieran en la trama solo es una suposición interesada. Primero, porque que diputados del mismo grupo, o incluso de grupos diferentes cenen o almuercen juntos ni es delito ni es una anécdota. Es la normalidad de la vida parlamentaria. Segundo, que los diputados reciban a empresarios, sindicatos y asociaciones de todo tipo en el Congreso es su trabajo. Vergüenza ajena me provoca ver como algunos medios de comunicación ponen el grito en el cielo porque se recibieron las visitas en el congreso y se hicieron fotos. Es una nimiedad y una veleidad que el diputado Berni recibiera visitas en el congreso. Lo grave, si existe, es si utilizaba su puesto para vulnerar la ley en favor de la trama.

La pelea política ha degenerado en orgía pagana con el difama que algo queda. El PP pide una comisión de investigación y no descarta pedir la comparecencia de Pedro Sánchez porque es el presidente del Grupo Parlamentario. Dicho de otro modo, se desliza que el presidente estaba al cabo de la calle de las tribulaciones de su parlamentario. Esto es tanto como decir que Alberto Núñez Feijóo está al cabo de la calle de que la senadora y alcaldesa de Marbella ha visto crecer su patrimonio de manera exponencial, que su marido y el hijo de éste están imputados en un caso de narcotráfico. ¿Suena a exageración? Sí, en un caso y en el otro. Y podríamos añadir un tercero porque el presidente canario, Ángel Víctor Torres, ha sido señalado, y dilapidado, como máximo responsable de la trama. Es la tónica habitual de pasarse de frenada. No interesa tanto saber la verdad, sino lesionar al adversario, y cuánto más lesionado mejor.

El PSOE está preocupado, sí, porque se desconoce el alcance de la trama que el juez la sitúa activa un año. O no daba para tanto o los que se hacían pasar por conseguidores eran unos fantasmas que no conseguían ni lo evidente. Pero, sobre todo el PSOE está herido en su dignidad. Que un diputado vote contra la prostitución por la tarde y por la noche se vaya de putas ha sido un golpe bajo. Que un partido feminista y de izquierdas tenga entre sus filas a indeseables, y no saber de su existencia, ha sido un golpe reputacional. El sumario convenientemente filtrado hace las delicias del amarillismo más reconcentrado, pero recuerden un cosa. El sumario no necesariamente es la verdad. Solo son indicios.