Parlamento Regional

Lambán reclama en su investidura «la vuelta a la centralidad» del PSOE

El presidente de Aragón revalida el cargo tras pactar un Gobierno de coalición con Podemos, PAR y Chunta y cerrar el apoyo parlamentario de Izquierda Unida, que se queda fuera del Ejecutivo.

El socialista Javier Lambán (i) que ha prometido hoy su cargo como presidente del Gobierno de Aragón, recibe las felicitaciones de la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo
El socialista Javier Lambán (i) que ha prometido hoy su cargo como presidente del Gobierno de Aragón, recibe las felicitaciones de la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvolarazon

Lambán revalida el cargo tras pactar un Gobierno de coalición con Podemos, PAR y Chunta y cerrar el apoyo parlamentario de Izquierda Unida, que se queda fuera del Ejecutivo.

Volver a la centralidad, iniciar un camino con dirección a gobiernos transversales y anteponer el interés de España a los del partido. Son algunos de los retos que ayer lanzó el reelegido presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, en su toma de posesión en la sede de las Cortes de Aragón. Unos guiños en clave autonómica pero que hacían referencia explícita a la situación de bloqueo gubernamental que atraviesa el país. Un guante que fue recogido por la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, y el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, que le acompañaban.

El presidente autonómico socialista hizo bandera del gobierno de coalición que ha logrado pactar en Aragón, apenas diez días después de que fracasara la investidura de Pedro Sánchez en el Congreso. Lambán, que gobernará con el cuatripartito PSOE-Podemos, CHA, y PAR, destacó que su comunidad «tiene retos importantes» pero también «grandes oportunidades» y que «para su gestión exitosa» no pueden depender de un solo partido» y «no pueden ser privativos de la izquierda o la derecha» sino que necesitan «gobernanzas transversales, moderadas, plenamente instaladas en la centralidad», informa Ep.

Lambán citó al recientemente desaparecido Alfredo Pérez Rubalcaba para afirmar que a él no le importa virar hacia la centralidad. «A mí, como adscrito a una corriente, a una tradición del PSOE, que, en mi opinión, inauguró Indalecio Prieto, no me cuesta demasiado trabajo instalarme en esa centralidad, en la anteposición del interés general a los intereses de partido», dijo. «Por decirlo en palabras de nuestro cada día más añorado Alfredo Pérez Rubalcaba –continuó– un socialista a la hora de establecer prioridades si en un momento determinado ha de anteponer el interés de España al interés del PSOE no debe tener absolutamente ninguna duda: antes el interés de España que el del partido».

Después, la vicepresidenta del Gobierno, en clave nacional, reclamó a los partidos asumir parte de la responsabilidad para llegar a acuerdos y sostuvo que el momento actual pide que la «confrontación dé paso a la cultura de la colaboración». A pesar de que, a día de hoy, las conversaciones entre PSOE y Podemos siguen atascadas, confió en que todavía hay tiempo para llegar a acuerdos.