Moncloa pone un coche al juez Peinado para que interrogue allí a Bolaños

Desde el Ministerio de Justicia, Presidencia y Relaciones con las Cortes han trasladado por correo electrónico al juez del "caso Begoña Gómez" que acceden a su petición de poner a su disposición un vehículo que le lleve desde Plaza de Castilla al Palacio de la Moncloa para que tome declaración allí al ministro Félix Bolaños, tal y como ha podido confirmar LA RAZÓN de fuentes jurídicas.

Desde el equipo de Bolaños se reclamó al titular del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid que no se celebrase la comparecencia como testigo del ministro socialista en la sede que la cartera de Justicia mantiene en la céntrica y madrileña calle de San Bernardo en base a los "problemas de seguridad" que sostiene su escolta que generaría.

Alternativamente, se planteó el instructor que la cita judicial tuviese lugar en el despacho que Bolaños mantiene en el complejo presidencial y en su respuesta el juez Peinado señaló que "no existe inconveniente" si se le garantizaba una rápido acceso, que reprochó que no tuvo cuando tomó declaración al presidente del Gobierno el pasado julio, o, alternativamente, facilitasen un automóvil del parque del ministerio que le llevase a Moncloa y le devolviese a su tribunal.

Ahora, "para facilitar el acceso y salida" de la comitiva judicial a la residencia de Pedro Sánchez se le ofrece "disponer de un vehículo del parque móvil" de Presidencia. Para ello, se indica en el mail, "necesitaremos que nos indique la hora y lugar de recogida" y la "identidad" de todas las personas que integrarán la comisión del juzgado que acudirá a interrogar a Bolaños el próximo 16 de abril.

El instructor se quejó al Gobierno de que cuando acudió para escuchar al jefe del Ejecutivo se le retuvo durante "un periodo de tiempo sensiblemente superior al necesario", cuando ya se le había identificado en el primer control de acceso al palacio.

En esos minutos asegura que le dejaron sin protección de los efectivos de la Policía Judicial que le acompañaban, dado que se les dejó pasar antes al recinto. Generándole, expuso en el auto, "un riesgo" para su "integridad física" al haber "un nutrido número de personas expectantes en las inmediaciones" del vehículo.

Mientras que al abogado de Gómez, el exministro socialista Antonio Camacho, -sacó también a relucir- "accedía sin espera de ningún tipo, elevando la barrera paralela a la que estaba impidiendo el paso" al coche del juzgado.

Bolaños declarará como testigo en la pieza separada que indaga en si hubo malversación de caudales públicos en la contratación y desempeño de la asesora gubernamental Cristina Álvarez, que se encarga de asuntos privados y profesionales de la esposa del presidente. El juez Peinado quiere escucharle porque cuando se nombró a Álvarez, en el verano de 2018, era el secretario general de Presidencia y, por tanto, superior jerárquico del alto cargo que elevó la contratación. No le permitió contestar a sus preguntas por escrito, como requirió, porque en el momentos de los hechos investigados no era ministro y esta posibilidad se reserva en la ley para miembros del Consejo de Ministros.