Sumar planta al PSOE y se abstendrá en la reforma del CGPJ pactada entre PSOE y PP

Sumar escenificará su malestar con el PSOE este jueves en el Congreso de los Diputados y se abstendrá en la toma de consideración de la proposición de ley del PSOE y PP para la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial. El socio minoritario en la coalición volverá a romper la unidad de voto que firmaron cuando Pedro Sánchez y Yolanda Díaz reeditaron el Gobierno y se desmarcará del PSOE en la Cámara Baja.

En la coalición Sumar, la renovación de la cúpula del Consejo General del Poder Judicial ha supuesto un terremoto y un nuevo elemento de desestabilización entre los propios partidos que conviven en el Congreso puesto que el grupo parlamentario ha pasado de aplaudir el acuerdo a reprocharlo en la misma semana. La formación de Yolanda Díaz expresó solo 24 horas después de que ella misma mostrara su satisfacción por el acuerdo, su malestar por haberse encontrado con la proposición de reforma de la ley del Poder Judicial cerrada, sin haber podido participar en la redacción de la norma. Es por eso que dentro del grupo parlamentario se ha dado un debate intenso en las últimas horas sobre cómo debía actuarse mañana en el Congreso, es decir si votar abstención -como aconsejaba el núcleo duro de Yolanda Díaz, o abstención, como Compromís Mes y la Chunta, cuyos representantes han sido muy críticos con los términos del acuerdo.

Finalmente, según informan fuentes del grupo parlamentario tras la reunión de la dirección, el partido ha decidido abstenerse. Califican las medidas de "correctas" pero "insuficientes". Habrían preferido "avanzar más en la democratización del Estado y, al no haber opción de enmendar la norma -PSOE y PP acordaron no aceptar enmiendas de los grupos parlamentarios- han optado por la abstención.

En el grupo parlamentario buscan advertir al PSOE de que "el camino a la democratización del Estado" no puede hacerse con el PP, sino "con la mayoría de la investidura". Un aviso en el que los socios habituales del Congreso ya habían transitado la pasada semana cuando dejaron en vilo la legislatura al entender que el PSOE había decidido "un cambio de socio" al acordar la renovación del CGPJ con el PP.