Salud y bienestar

Otoño, el momento ideal para crear tu futuro

Cuando el verano acaba, muchas personas tienen que dar un paso atrás. Recuperar los hábitos, volver a la normalidad y ordenar los pensamientos. Aceptar la realidad, en definitiva, la vuelta a la rutina.

Cuando el verano acaba, muchas personas tienen que dar un paso atrás. Recuperar los hábitos, volver a la normalidad y ordenar los pensamientos. Aceptar la realidad, en definitiva, la vuelta a la rutina.
Cuando el verano acaba, muchas personas tienen que dar un paso atrás. Recuperar los hábitos, volver a la normalidad y ordenar los pensamientos. Aceptar la realidad, en definitiva, la vuelta a la rutina.PIXABAY

Cuando el verano acaba, muchas personas tienen que dar un paso atrás. Recuperar los hábitos, volver a la normalidad y ordenar los pensamientos. Aceptar la realidad, en definitiva, la vuelta a la rutina. Ya sea en el trabajo, en casa o practicando deporte, hay crear nuevos retos para el nuevo curso que comienza, todo ello se consigue creando hábitos positivos con el objetivo de llevar un estilo de vida atléticos, saludable y conseguir que tu día a día sea más eficiente y productivo.

Un estudio elaborado por Freeletics, aplicación de fitness e inteligencia artificial, en España entre 1.000 adultos demuestra que la falta de tiempo es la excusa que aduce 1 de cada 3 españoles (35 %) para no hacer ejercicio físico, mientras que el 29 por ciento esgrime falta de motivación como causa de abandono de una rutina saludable.

Lo primero es crear hábitos positivos y, además, mantenerlos a medio y largo plazo. De mano de los expertos de Freeletics, la aplicación de fitness número 1 en Europa, recomiendan algunas pautas sencillas para ponerse en forma a la vuelta de vacaciones y recuperar esos hábitos saludables.

Establece objetivos. Antes de empezar hay que crear una meta y focalizar la motivación en el objetivo a trabajar. ¿Cuál es tu reto? La meta debe ser asequible, de lo contrario las posibilidades de éxito pueden disminuir. Desde Freeletics aconsejan establecer solo una meta a la vez y no muchas a la vez. «Cualquiera que intente hacer todo a la vez está pidiendo demasiado al cuerpo y la mente y es probable que fracase», matizan.

La rutina ayuda. Reserva un tiempo para practicar ejercicio, si es todos los días, mejor. Recuerda que si necesitas hacerlo a diferentes horas todos los días, no pasa nada. Lo importante es disponer de algo de tiempo para ti. Cada sesión de entrenamiento tiene como objetivo desafiarte en cada reto propuesto.

Empieza a andar. Caminar aproximadamente 10.000 pasos a lo largo del día puede llegar a quemar unas 400 calorías.Caminar ayuda a tonificar las piernas, los tobillos y los gemelos. Además, una caminata a paso ligero tiene los mismos beneficios cardiovasculares que una carrera a trote lento. Caminar por terrenos diferentes, como la arena o la gravilla, hace que los músculos trabajen de forma más efectiva.

Salir a correr. El cuerpo está diseñado para correr, tengas tiempo o no, y no, no es peligroso... deja las excusas a un lado y desata tu habilidad natural. Con el running se entrena alrededor del 70 % de los músculos, es una de las prácticas más útiles para ponerse en forma. Desde Freeletics aconsejan comenzar con el Training Journey Running híbrido que dura 12 semanas. Este nuevo entrenamiento es la combinación perfecta para acabar con esos kilitos de más que hemos cogido durante las vacaciones. «Es una combinación entre el entrenamiento HIIT, el running y el peso corporal ya que se usa más energía que en el entrenamiento de resistencia regular", matizan. «Además, se trabaja más músculos que cuando solo se sale a correr y promueve el efecto afterburn, por lo que el cuerpo continúa quemando calorías después de entrenar», concluyen.

La alimentación y el descanso son fundamentales. Para ponerse en forma es importante volver a una rutina de dieta y sueño saludables. Realizar ejercicio no significa descuidar los otros dos pilares fundamentales para nuestro bienestar.

Cuida la mente. Ponerte en forma y estar sano a largo plazo es una cuestión de control mental. «Crear hábitos saludables y comprender que eres más grande que tus excusas para asegurarte de que el ejercicio y una nutrición saludable se conviertan en parte de tu estilo de vida incluso cuando la tentación esté por todas partes, o cuando no sigas tu rutina habitual», explica el Dr. Kianoush Missaghi, Training Experience Manager de Freeletics. Un buen conocimiento del propio cuerpo y de la propia mente es esencial para no dejar que el estrés se imponga.